El Sevilla, campeón del torneo las dos últimas temporadas, empató 0-0 en su visita al Basilea, este jueves en la ida de octavos de final de la Europa League, con lo cual dejó todo en el aire a la espera de la vuelta de la próxima semana en suelo español.

El resultado no es del todo cómodo para el equipo andaluz, ya que si los suizos consiguen marcar en el estadio Sánchez Pizjuán se clasificarían en cualquier resultado con empate por el mayor valor de los tantos fuera de casa.

El francés Steven N'Zonzi fue expulsado en el Sevilla en el minuto 86, al ver la segunda amarilla, y su equipo tuvo que terminar los últimos minutos con uno menos.

Los hombres de Unai Emery, verdugos del Molde noruego en la anterior ronda, tendrán que trabajar duro en la vuelta ante el líder de la liga suiza si quieren volver al estadio St Jakob Park de Basilea, donde se disputó el partido este jueves y donde tendrá lugar la gran final de esta edición, el 18 de mayo.

El Sevilla levantó el trofeo de campeón tras las finales de 2014 en Turín y de 2015 en Varsovia. Además fue campeón de la Copa de la UEFA, antecedente directo de la actual Europa League, en 2006 y 2007. Ello le sitúa en cabeza del palmarés de este torneo.

El Basilea, que en los dieciseisavos de final se deshizo del Saint-Etienne francés gracias a un gol en el descuento, esperan poder brillar en la segunda competición europea igual que en 2013, cuando llegaron hasta las semifinales, antes de ser eliminados en puertas de la final por el que luego sería el campeón, el Chelsea inglés.