"Nunca antes estuve en Paraguay, y es extraño", expresó Lionel Richie, con su inmensa sonrisa, y el carisma que se permite un artista con el peso de su historial en los escenarios. Y el de anoche, con un público paraguayo conectado a esta estrella, en una noche mágica, en el Yacht, fue un escenario electrizante, donde desfilaron los éxitos y las emociones.
Tras la apertura a cargo del grupo nacional Purahéi Soul, el público se fue ubicando al ritmo de una selección de hits de Michael Jackson. Las luces bajaron hacia las 21:45, para dar la bienvenida al esperado artista de 66 años, que solo un par de horas antes había arribado al país, tras arrasar con los públicos del Festival de Viña del Mar y de Buenos Aires.
El tema "Running With the Night" encendió la velada, con Lionel enérgico, recorriendo lo largo del escenario, y observando a una platea que iría euforizándose. Inmediatamente la memorable "Penny Lover" animó a encender los teléfonos con mayor convicción, y mover los brazos en la cadencia romántica, mientras Richie dejaba lucirse a sus músicos.
"80's", se leía a secas en un cartel levantado por una señora, frente al escenario. Puntualmente, apareció el piano, y el músico invitó a recordar a los Commodores, aquella banda de la que fue parte durante la década de los años 1970: "Easy". Volviendo a su era solista, ya en los 80, se engancharon las melodías de "My Love", "Ballerina Girl", "You Are", hasta otra balada de profunda resonancia intimista "Stuck on You".
El court central del Yacht retrocedió a una discoteca disco, con otro hit inevitable: "Brick House", seguido de un cover con ascedencia funky "Fire" de Ohio Players. Siguieron los temas de Commodores: "Three Times a Lady" y "Lady"; y de la colección solista: "Endless Love", "Say You, Say Me", "Dancing on the Ceiling". Naturalmente, el final desplegó el cartel de los "80's" en toda su inmensidad, con: "Hello", "All Night Long" y "We Are the World".