El renovado Guaraní, con la conducción técnica de Fabricio Bassa, inicia esta noche una nueva ilusión en la Copa Libertadores 2016. Los legendarios, que el año pasado rompieron su propia historia al llegar a semifinales de la Copa luego de 49 años, buscarán un debut exitoso en su visita al Independiente del Valle de Ecuador.
El elenco aurinegro tiene la imperiosa necesidad de mejorar su nivel de juego, tras la pobre exposición en el torneo local. Es evidente que los legendarios resienten la ausencia de grandes futbolistas que se alejaron de la entidad, como los goleadores Federico Santander, Fernando Fernández y Julián Benítez, quienes sobresalieron por su agresividad, picardía y contundencia en ofensiva. Hoy toda la responsabilidad queda a cargo de Claudio Correa y el goleador histórico, el uruguayo Rodrigo López, quien aún no está adaptado al juego que pretende el nuevo adiestrador charrúa.
Según Bassa modificará su estrategia, apostará a un esquema mucho más defensivo, y buscará sorprender al rival con salidas rápidas por los laterales. El profesional, que aún no tiene definido el once inicial, tiene a todos los jugadores disponibles y espera traer un buen resultado de tierras ecuatorianas. El objetivo de Guaraní tiene la ilusión de ganar la fase de repesca para integrar el grupo 5, con Colo Colo de Chile, Atlético Mineiro de Brasil y Melgar de Perú. La revancha será el próximo jueves 11 en el Defensores del Chaco.
Por el lado de Independiente del Valle, dirigido por Pablo Repetto, que tiene una plantilla en la que prevalece la juventud, también está con la ilusión de avanzar en la Copa. En la portería estará el golero paraguayo Librado Azcona.