Por Natalio Rubinsztein
Socio de BDO AUDITORES CONSULTORES
En el presente artículo estamos indicando una serie de situaciones que es dable encontrar a menudo. El mismo ha sido preparado sobre el contenido del libro del Lic. Jorge Etkin (catedrático de la Universidad de Buenos Aires) llamado "Transparencia y opacidad, la doble moral de las organizaciones". Dicho Libro estudia la coexistencia del orden y el desorden, lo constructivo y a la vez lo destructivo en el quehacer cotidiano de grupos y organizaciones. Que sostiene la existencia de una perversidad oculta en la injusticia y la desigualdad de la ideología, el dogma, la hipocresía, el doble discurso, la persuasión, o bien la mentira institucional.
Los temas tratados y las situaciones presentadas se dan en el orden económico, cultural, jurídico, político, en el de las comunicaciones, en las organizaciones en sí mismas e incluso en la trama del poder. Prácticamente de modo universal.
Indicamos a continuación algunos aspectos particulares relativos al orden económico:
-La decisión de eliminar excedentes de la producción agrícola para mantener los precios de mercado de un producto, en una sociedad globalmente empobrecida.
-Los sistemas impositivos cuyo mayor peso recae sobre los ciudadanos de menores recursos, por ejemplo basados en gravámenes a los consumos básicos que hacen pagar más a quienes menos tienen.
-Los bancos de fomento que solo prestan a quienes ya tienen patrimonio y que por su solvencia podrían devolver los fondos en el momento en que los reciben.
-Los procesos de innovación tecnológica que se instrumentan sin considerar sus impactos sobre los valores culturales de una comunidad (por ejemplo, un buque factoría en un pueblo de pescadores).
-Los procesos de renovación productiva y económica en los centros industriales que no preparan culturalmente a sus actores para superar la deshumanización de las nuevas tecnologías.
-El condicionamiento de la ayuda crediticia a las pequeñas explotaciones agrícolas con la imposición de tecnologías que llevan a la disolución de los vínculos familiares.
-La condena a la marginalidad y la exclusión social para quienes son desocupados debido a los desajustes del sistema económico, el mismo que luego los rechaza y no los emplea por considerarlos vagabundos.
-Los estados de carencia y desocupación que obligan a obreros a aceptar tareas peligrosas e insalubres sin la protección adecuada.
-Acciones desleales y destructivas entre competidores de un mercado cuando es legítimo utilizar la rentabilidad como único valor de supervivencia para las empresas.
-El endeudamiento público generado por distintos gobiernos para solventar sus gastos corrientes, y que deberá ser pagado por las generaciones venideras.
En suma, situaciones que ocurren en distintos países (en algunos en más u otros en menos) y respecto de los cuales encontramos grandes coincidencias con lo que experimentamos en nuestro medio.