• Por Lourdes Torres
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El actual presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), Francisco Ruiz Díaz, lamentó que nin­guna isla que se encuentra en los ríos de Paraguay y Paraná está catastrada ni titulada, siendo que por ley forman parte del patrimonio del Estado. Señaló que en esa condición es prácticamente imposible hacer ejercicio de soberanía territorial. Por lo que desde esta institución han iniciado labores para cuantificar en primer lugar, el número de islas, luego catas­trarlas y finalmente poner los títulos en regla.

En comunicación con el diario La Nación/Nación Media, el presidente Ruiz Díaz señaló en primer lugar que la Constitución Nacio­nal determina que todas las islas de formación natu­ral deben ser propiedad del Estado paraguayo, lo que sig­nifica que ninguna isla puede ser transferida a manos pri­vadas. Explicó que, al ser del Estado paraguayo, pasan a ser de dominio público y conforme al Código Civil se determina que los bienes de dominio público deben for­mar parte del inventario de bienes e inmuebles del Estado paraguayo; y es ahí que pasan a ser del dominio del Indert, y que deben estar registrados como parte del patrimonio de la institución.

Mencionó que, a partir de este marco jurídico, este es un trabajo histórico que se debió haber hecho, incluso, desde la época en que se fir­maron los Tratados de Lími­tes en la posguerra de la Tri­ple Alianza (1872 con Brasil) (1876 con Argentina), pero que a la fecha la institución no ha titulado ni catastrado las islas. No obstante, cabe señalar que todas las islas en aguas com­partidas ya fueron adjudica­das al Estado paraguayo, así como a los países vecinos, tal como establece los tratados.

“Cuando se tiene la respon­sabilidad de tener estas tie­rras, lo primero que necesi­tamos es un catastro de islas, que no tenemos. Luego hacer un relevamiento en relación a la superficie, que en el caso de las islas es variante depen­diendo del nivel del río. Ade­más, cada isla debe estar titu­lado para ejercer el derecho dominial sobre esas islas”, explicó.

En cuanto al ejercicio de la soberanía, indicó que se con­solida a través de la ocupación y posesión. Una ocupación de la isla es instalarse en el lugar, levantar la bandera para­guaya y realizar actos pose­sorios como plantar árboles, ordenar y limpiar la superfi­cie territorial.

“Hoy nosotros no sabemos cuántas islas hay en el río Paraná, y cuántas hay en el río Paraguay, al no tener un catastro de isla estamos con el inconveniente de que nin­guna de ellas tiene registro patrimonial en poder del Estado paraguayo, es decir, a nombre del Indert, y las tie­rras tienen que tener título de propiedad a favor del Estado paraguayo”, comentó.

Por otra parte, indicó que durante el recorrido que rea­lizaron en la zona de Misiones notaron algunas ocupacio­nes ilegales y precarias que genera preocupación no solo por la ocupación, sino por la depredación.

“Seguramente son compa­triotas que están viendo la posibilidad de ir ocupando el lugar de manera ilegal y hay que tener en cuenta que las islas son patrimonio del Estado y cualquier intento de ocupación sin la autorización, en este caso del Indert, es una violación a los derechos patri­moniales. Entonces, en algún momento, además de catas­trar, titular, vamos a tener que iniciar el desalojo”, advirtió.

Mencionó que ya en gobiernos anteriores se han dado casos de arrendamientos o alquile­res de islas para la explotación turística. Mencionó que no son muchos casos, pero sí es importante señalar los casos de las isla de la zona de Ayo­las, departamento de Misio­nes, donde se utilizan algu­nas islas para hacer turismo y desarrollar la economía local.

“Una de las islas que visita­mos esta semana es la cual la institución le está arren­dando, ya con la aprobación de la junta asesora de Control y Vigilancia de la presidencia del Indert, que en adminis­traciones pasadas ya se optó por el arriendo, de tal manera que se desarrolle en esas islas actividades que estén vincu­ladas al ejercicio de nuestra soberanía y el ejercicio patri­monial también”, acotó.