Beatriz Denis, hija del exvi­cepresidente de la República Óscar Denis, quien lleva tres años secuestrado por el grupo criminal autodeno­minado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), cuestionó duramente los privilegios que reciben criminales de alto peligro como es la con­denada Carmen Villalba, una reconocida líder de este grupo criminal.

El pasado viernes 17 de noviembre, una comitiva del Ministerio Público y la Poli­cía Nacional llevó adelante el Operativo Patria, en el penal de mujeres Buen Pastor, que procedió a un allanamiento en la celda de reclusión de Carmen Villalba, considerada líder y fundadora del EPP. En el operativo se incautó de más de una docena de celulares, una notebook que estaba en poder de la mujer, además de dinero en efectivo por valor de G. 4.500.000.

Al respecto, Beatriz Denis manifestó en comunicación con MegaTv su total repudio e indignación que siente la familia ante estas noticias. Aseguró que no hay huma­nismo que pueda tolerar estos privilegios que recibe esta mujer. “Cómo es que puede tener estos privilegios una persona que es líder de un grupo criminal como es el EPP, y que se le otorgue este tipo de cosas, cuatro celdas, celulares, dinero en efectivo, notebook. Estamos más que locos en este país. No se puede permitir este tipo de cosas, equipos con acceso a internet, desde donde pueden planifi­car los próximos secuestros”, cuestionó.

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MEDIOS PARA PLANIFICAR EL CRIMEN

Añadió que desde esos dis­positivos tecnológicos bien pudo haberse planificado el secuestro de su padre ocu­rrido el 9 de setiembre de 2020, así como el secuestro de Edelio Morínigo y Félix Urbieta, que igualmente lle­van varios años desapareci­dos. “Con esta complacencia y complicidad con autoridades de alto nivel y estos internos criminales en los centros de reclusión se pueden coordi­nar desde secuestros, asesi­natos, llamadas extorsivas, o cualquier tipo de cosas”, recriminó.

En otro momento, señaló que como familia están pla­nificando sus próximas accio­nes que pueda hacer como víctimas que son, no como autoridades. “Tenemos a un padre secuestrado hace más de 3 años y dos meses, para nosotros ya es una eterni­dad. Imagínense lo que sen­tirá ña Obdulia con más de 9 años de secuestro de su hijo Edelio, o la familia Urbieta que lleva 7 años clamando por don Félix. Es que noso­tros no tenemos que espe­rar nada de las autoridades, las autoridades deben cum­plir con el rol encomendado que es asegurar la libertad de todas las personas y no per­mitir este tipo de privilegios a criminales como Carmen Villalba”, enfatizó.

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