(o la idea del presidente de Dende de eliminar el voto directo)
- Por Felipe Goroso S.
Se juntan un grupo de amigos y socios de negocios para armar un think tank para planificar, fortalecer y financiar a la oposición. Con los años van construyendo poder de lobby. Hacen buenas migas con periodistas, publicistas, se codean con medios de comunicación. Como consecuencia, el presidente de la organización se vuelve una especie de George Soros del subdesarrollo. Hacen cursos y charlas para los más ricos, sus amigos y sus hijos y otros pocos que pueden pagarlos. Muy pocos. Para los que no, especialmente periodistas, otorgan convenientes becas. Los cursos los dan solo quienes piensan igual, con la misma mirada lineal y chata. Así se forman burbujas de información suficientemente sesgadas.
Los pseudoasesores del club de amigos no pasan de ser comisarios políticos de grupos de medios abiertamente anti Partido Colorado y gente que alguna vez tuvo su paso por el mundo de la publicidad para campañas opositoras hoy más dedicados a rubros de producción agrícola. Suman más sesgos. En los últimos meses, los mismos le hicieron meter la pata al plantear que la Concertación podía ganar. Con encuestas truchas y más burbujas informativas, el club de amigos decidió invertir en la apuesta electoral. Primero con una candidatura presidencial de una exministra de la Vivienda y al darse cuenta que no prendía en la medida de la cantidad de retuits que tenían (el Twitter es el parámetro), no les quedó otra que hacer una alianza vergonzante con Efraín Alegre para intentar mejorar las expectativas electorales. Todos sabemos cómo les fue.
Luego de haber planteado el desbloqueo como la gran panacea para tumbar a la ANR, porque con el anterior sistema electoral “no llegaba la mejor gente”. Hoy, habiendo hecho todas las reformas electorales que creían que les convenía y que les darían la victoria, se han estrellado electoralmente y dilapidaron sus recursos. Como en sus análisis FODA no está asumir que se equivocaron de cabo a rabo, prefieren cargar las culpas sobre el electorado e ir por todo. No se les ocurre mejor idea que proponer la eliminación del voto directo en las internas de los partidos políticos, torpedear la línea de flotación de la democracia misma y apelar a una política donde solo participen los que piensen como ellos. Bajo la excusa de un supuesto mérito (absolutamente subjetivo) con base en el país de unos pocos. Porque todos son idiotas. Menos el club de amigos.
Siguen dando la espalda a la realidad que dice que la política y sus actores los políticos son el fiel reflejo de la sociedad que tenemos (en el mismo sentido que los dirigentes gremiales, o de las oenegés). Por último, nunca viene mal recomendar un libro, bien vendría darle una lectura (quizás incluso dos) a “La política en tiempos de indignación”, de Daniel Innerarity. Leer algo distinto a la burbuja de sesgos y cambiar asesores, tal vez eso ayude a dejar los planteamientos totalitarios.
Luego de haber planteado el desbloqueo como la gran panacea para tumbar a la ANR, porque con el anterior sistema electoral “no llegaba la mejor gente”.
Como en sus análisis FODA no está asumir que se equivocaron de cabo a rabo, prefieren cargar las culpas sobre el electorado e ir por todo.