El Gobierno condecoró a Koki Ruiz, creador del proyecto Tañarandy
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El presidente de la República, Santiago Peña, entregó la Condecoración de la Orden Nacional del Mérito en el Grado de “Gran Cruz” a Delfín “Koki” Ruiz, creador del proyecto Tañarandy, tradicional celebración de Semana Santa que inició en 1992 en la compañía del mismo nombre en el distrito de San Ignacio (Misiones). El acto se realizó el pasado 21 de marzo en el Palacio de López.
“Hoy estamos homenajeando a un gran paraguayo, hoy estamos homenajeando al país, porque eso es lo que evoca Koki Ruiz”, dijo el mandatario en el acto desarrollado en el Salón Libertad. Además de la distinción, el artista protagoniza el episodio de estreno de la serie documental “Mborayhu Porã” sobre los grandes exponentes del Paraguay.
La Orden Nacional del Mérito, la más alta distinción civil y militar concedida por la República del Paraguay, encuentra un nuevo motivo de orgullo al honrar a una figura destacada de nuestra sociedad. Este reconocimiento fue otorgado a Ruiz por su destacada labor y por las significativas contribuciones al desarrollo y el bienestar de nuestra nación.
“Esta serie documental, reconoce a aquellos ciudadanos que han hecho el bien, y que han contribuido de manera significativa en sus comunidades, demostrando un verdadero amor desinteresado, dejando huellas profundas, y, sobre todo, dejando un legado”, explicó Adriana Ortiz Semidei, ministra de Cultura, sobre la pieza audiovisual realizada por Tana Schémbori y Juan Carlos Maneglia, con el apoyo de la Presidencia de la República, la Itaipú Binacional, el Mitic y la Oficina de la Primera Dama.
Mborayhu pora, que significa “palabra-alma hermosa” en la lengua de los mbya guaraní, es un testimonio del espíritu comunitario y la sabiduría ancestral que enriquece nuestra identidad nacional. A través de esta serie se busca rendir homenaje a aquellos ciudadanos que han demostrado un amor desinteresado por sus comunidades y han dejado un legado perdurable.
Koki Ruiz es conocido por su incansable compromiso con el progreso social y el fortalecimiento de los valores comunitarios, su obra se caracteriza por abordar temas como la cultura popular, la religiosidad, la naturaleza y la historia, utilizando una mezcla de estilos primitivista, expresionista y surrealista.
Koki Ruiz superó exitosamente compleja cirugía en Brasil
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Este lunes, el reconocido artista plástico Delfín “Koki” Ruiz se sometió a una compleja cirugía en la ciudad de San Pablo, Brasil, que resultó todo un éxito. Actualmente, Ruiz se encuentra internado en Unidad de Terapia Intensiva (UTI) y se espera su buena recuperación en las próximas 24 horas.
Sus familiares indicaron que en horas de esta mañana tuvo que ser sometido a una cirugía y que los médicos confirmaron que fue muy compleja, pero que todo resultó bien y que se aguarda que responda satisfactoriamente a la misma. Allegados, amigos y la población en general están realizando cadenas de oración por su salud.
“Salió todo bien gracias a Dios, fue todo un éxito la cirugía. Ahora esperamos las próximas 24 horas de evolución. Ahora está en terapia para su recuperación, pero luego pasará a sala normal”, expresó su hija, Macarena Ruiz, a La Nación/Nación Media.
Explicó que los médicos quedaron muy contentos con la cirugía y remarcaron que fue muy favorable. “Salió como los médicos esperaban la operación”, detalló. En redes sociales, Macarena informó sobre el estado de salud del artista y los internautas enviaron sus buenas vibras y oraciones para que el querido Koki supere este momento.
Condecorado
En marzo de este año, el presidente Santiago Peña entregó la Condecoración de la Orden Nacional del Mérito en el Grado de “Gran Cruz” a Koki Ruiz, creador del proyecto Tañarandy, tradicional celebración de Semana Santa que se inició en 1992 en la compañía del mismo nombre en el distrito de San Ignacio, Misiones.
Koki Ruiz es arquitecto, artesano, pintor, dibujante y artista plástico; en su momento, mencionó que ama lo que hace y que se siente muy orgulloso de lo que logró con Tañarandy. “Me siento afortunado por la comunidad donde estoy trabajando siempre, de tener tantos amigos y tantas respuestas de la gente”, dijo en entrevista con LN, tras su reconocimiento como Héroe Popular, premios entregados por Nación Media.
Reconocido por su trabajo artístico, Delfín Roque Ruiz Pérez, más conocido como Koki Ruiz, el cual lleva el sello de la Marca País, quien comentó que contar con esta marca de la Red de Inversiones y Exportaciones significa un símbolo de su talento, lo ha llenado de orgullo y motivación para seguir trabajando arduamente en su arte.
El artista plástico, oriundo de la localidad de Misiones, comentó que, contar con esta insignia ha abierto puertas para que su obra sea exhibida en exposiciones internacionales. Cabe mencionar que, el mismo es el cerebro maestro detrás de las obras emblemáticas expuestas todos los años en la Tañarandy.
Asimismo, Koki destacó la importancia de este reconocimiento para el sector artístico paraguayo, afirmando que “todo reconocimiento suma” y que esta distinción aumenta las oportunidades para él y para otros artistas de su país.
“Es un honor ser reconocido como Marca País. Esto significa que mi trabajo está siendo valorado y que tengo la oportunidad de representar a mi país en el escenario internacional”, comentó el artista.
El pasado Viernes Santo se realizó otra edición más del tradicional viacrucis de la comunidad de Tañarandy, ubicada en la ciudad de San Ignacio Guasu, departamento de Misiones. Un equipo de La Nación/Nación Media tomó parte de todo el recorrido para acercarte detalles de la emotiva jornada religiosa junto con instantáneas de los momentos más destacados de la actividad, que conjuga arte y fe en su máxima expresión.
Llegamos poco antes del mediodía, cuando ya se observaba un importante movimiento en el entorno de la capilla Santa Cruz Tañarandy, donde los fieles acudían para la veneración a la Virgen de los Dolores, conocida como la Dolorosa, antes del inicio de la procesión. El operativo de seguridad se encontraba en pleno despliegue y las calles por donde se realizaría el recorrido ya estaban valladas y destinadas exclusivamente para el paso peatonal.
A lo largo de los caminos vecinales de la comunidad se aprecia un detalle curioso. Al lado del portón de entrada de cada casa luce un cartel con los apellidos de las cabezas de familia y un dibujo alusivo a la profesión que desempeñan los jefes de hogar, ya sea agricultor, comerciante, docente, etc.
En las primeras horas de la tarde terminan de acomodarse los últimos puestos de venta de la más diversa serie de artículos, ya sean algodones de azúcar, el tradicional chorizo misionero, chipas, bebidas, sombreros, quepis, suvenires, entre otros.
El movimiento de gente es tranquilo pero incesante en todas direcciones. El puesto de bomberos y de primeros auxilios se ubica en el cruce del trayecto que va de la capilla a la barraca, donde ya está puesto el retablo y los primeros adelantados ya buscan con sus sillas a cuestas ubicarse en el mejor lugar en la cúspide de la pequeña elevación que rodea la laguna en uno de sus flancos.
LOS CANDILES
Puntualmente a las cuatro de la tarde, cuando el sol aún fulgura con fuerza, los voluntarios inician la instalación de los candiles de apepu rellenos con cera de vela y una gruesa mecha de hilo en cuatro hileras y a dos pasos de distancia cada uno a lo largo del camino. “Enoheve, emoingueve (sacá un poco más, meté un poco más)”, dirige un hombre desde un motocarro buscando que las velas queden lo más alineadas posibles, lo cual a pulso directo nunca es una tarea fácil.
Seguimos el rastro hasta llegar a la estancia La Gloria, de la familia Riveros Acosta, donde aguarda la imagen lacrimosa de la Dolorosa envuelta en una capa negra con lentejuelas y mostacillas montada en una carroza adornada con crisantemos y trece velas.
Avanzamos hasta la casa para pedir un poco de agua. Por el camino nos recibe con alegría Negrito, el perro de la familia, y amablemente doña Gloria y su esposo nos convidan unas chipitas y nos ofrecen asiento para descansar un poco antes del inicio de la peregrinación.
Cuando le consulto a qué hora es traída la imagen de la Virgen desde la capilla, me cuenta que se trata de otra escultura, que es la original y cuya réplica fue solicitada por la comunidad al artista Koki Ruiz, ideólogo y líder del evento anual, para ser instalada en la iglesia debido a que durante todo el año hay visitantes de todos los puntos del país que desean venerar a la santa protectora de la localidad.
Sobre el trayecto previsto para el día, explica que el antiguo yvága rape (camino al cielo), como se llama al tramo de la procesión, fue reducida a un kilómetro debido a la entrada del empedrado sobre parte del viejo itinerario. Este cambio, que además posibilita la participación de más personas, se realizó con el fin de que el recorrido se realice íntegramente sobre caminos de tierra roja conservando la esencia de la Semana Santa a lo ymaguare (a la vieja usanza).
EL PURAHÉI JAHE’O
Respecto a la hora de salida, explica que se da cuando empieza a declinar el sol para que luzcan más los candiles. A medida que cae la tarde se empieza a escuchar a lo lejos el purahéi jahe’o (canto lastimero) de los estacioneros, que están conformados por tres grupos que provienen de las ciudades de Luque, Areguá y Capiatá. La fiesta está a punto de iniciarse. De pronto hay una invasión de libélulas danzantes que animan la tarde entre el vuelo rasante los ypaka’a.
A las cinco de la tarde llega el grupo de los estacioneros de Luque hasta el punto donde está la Virgen y desde donde partirá la procesión. “Señor mío Jesucristo, rojerure nde bendición (pedimos tu bendición/ Roipota orerovasami (queremos que nos bendigas)/Rojerure nde bendición/La Virgen de los siete dolores eĝuahemi orerehe (llega por nosotros)/ y los cuatro ángeles del cielo a Jesús oacompaña hare (y los cuatro ángeles del cielo que acompañaron a Jesús). Señores oreoyente (nuestros oyentes) /atendeme un poquitito/quiero publicar en verso la grandeza de Jesucristo”, cantan en su característico tono mientras se inicia la marcha.
Al cabo de unos 200 metros, sale al encuentro otro grupo de estacioneros que, unos de espalda y otros mirando al sol, cruzan sus cantos como en una payada de veneración.
“Ya hubo el saludo a la Virgen. Una vez que se ponga el sol vamos de acá a la barraca acompañando a la Virgen al encuentro con su hijo. Su hijo está en la cruz. Ahí se va a realizar el descenso de Cristo y a partir de ahí van a empezar todos los cuadros vivientes”, nos explica durante una de las paradas Almudena Ruiz, hija menor de Koki Ruiz.
TURISMO RELIGIOSO
Entre la numerosa concurrencia que participa de la actividad hay una gran cantidad de turistas de varios países del mundo deseosos de conocer más y tomar parte de una de las actividades más tradicionales y destacadas a nivel nacional.
Entre estas personas pudimos hablar brevemente con Cristina Länke, una estudiante noruega de 17 años que se encuentra en nuestro país como parte de un programa de intercambio y que vino a Tañarandy acompañada de su “mamá” de Paraguay, en referencia a la familia anfitriona que la acogió en su hogar. “Estoy en un colegio normal de secundaria aprendiendo la cultura. La verdad que es muy lindo todo, muy diferente de mi país”, valoró la joven.
Por su parte, la embajadora de España en Paraguay, Carmen Castilla, señaló que “es un placer poder estar participando de la Semana Santa paraguaya, que me parece se vive con enorme emoción y espiritualidad, que aúna la tradición y el arte popular poniendo de manifiesto el enorme talento que hay en este país y hasta qué punto todos nos sentimos conmovidos en una fecha como esta tan linda que también se celebra en mi país, pero acá los cantos son en guaraní, lo cual le da un sabor mucho más auténtico”.
Cuando las últimas luces del día se disipan se encienden las antorchas apostadas a ambos lados del camino. Al atravesar el puente se hace completamente de noche. Cerca de las 6 y media de la tarde llegan a la barraca la Virgen y su cortejo encabezado por los estacioneros, que son recibidos con sentidos aplausos.
CUADROS VIVIENTES
Tras el descenso de Cristo de la cruz, se realiza la representación de los cuadros vivientes basados en obras de renombrados artistas universales que recrean pasajes de la vida, pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Estos son “La última cena”, de Leonardo da Vinci; “El expolio, de El Greco, y “La conducción de Cristo al sepulcro”, de Antonio Ciseri.
Acto seguido, la Virgen y su séquito se retiraron de la barraca entre los aplausos de los concurrentes rumbo a la capilla, donde la actividad del día finalizó con un concierto fúnebre que contó con la participación de varios músicos que al son de violines, violonchelos y bajos ofrecieron al público un recital en el marco de la vigilia pascual.