El presidente de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), Enrique Duarte, conversó con el canal GEN y Universo 970 AM respecto a la situa­ción del empleo en general, los incentivos para la inver­sión en el sector industrial y las falencias a nivel país.

Dijo que hay una falta de coordi­nación en cuanto a políticas públicas para la generación de empleos de calidad, que es en lo que se necesita tra­bajar para que la ciudada­nía pueda sobresalir y desa­rrollar el país. “Al igual que la carencia de políticas más precisas, existen otros facto­res que conspiran contra la generación de empleo, como el fuerte golpe que hoy está generando el comercio ilegal o más conocido como el con­trabando”, expresó Duarte.

No obstante, el sector privado, y en particular la industria, a la que representa como gre­mio, seguirá siendo proactivo en apoyar el empleo formal y de calidad, ya que hoy la gene­ración es insuficiente. Indicó que cerca de 75.000 jóvenes ingresan anualmente a lo que se denomina la población eco­nómicamente activa (PEA), y según la Dirección General de Estadística, Encuestas y Cen­sos, solo la mitad de esa cifra consigue una ubicación; es decir, la otra mitad necesita de la generación de empleo para ingresar al mercado laboral. La situación es realmente seria, por lo que es necesario acompañar esa realidad como país, cuya principal falencia es la falta de definición de una política industrial, alegó Duarte.

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“En mi caso, hablo de la industria porque la inver­sión en este sector es la que más genera empleo. Tenemos motores de desarrollo como energía limpia, una población joven con capacidad de traba­jar y una presión tributaria baja para la inversión”, agregó.

Pero estas ventajas competi­tivas deben ser acompañadas con políticas públicas para la generación de empleos, más allá del incentivo a la inver­sión, porque no están bien definidos cuáles factores son los que se deben desarrollar, explicó el titular de la UIP. El gremio considera que no se puede continuar siendo exportadores de materia prima solamente porque de ese modo se desarrollan las economías foráneas y no la del Paraguay. “Hoy el mundo necesita alimentos, pero ali­mentos ya procesados con alto componente de transfor­mación, que es el valor agre­gado por el que las grandes economías pagan”, acotó.

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