“La agenda para los próximos días cubre varios tópicos importantes y prioritarios” para la región latinoamericana y caribeña, como la lucha contra la pobreza y el cambio climático, dijo en el discurso de apertura el nuevo presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el brasileño Ilan Goldfajn, este jueves pasado en Panamá.
La asamblea, que congrega a los responsables de finanzas del continente, comenzó pocos días después de la quiebra del Silicon Valley Bank y otros dos bancos en Estados Unidos, y de turbulencias en el Credit Suisse de Suiza. Estas turbulencias pueden frenar los créditos o encarecer sus costos, lo que perjudicaría directamente a las naciones latinoamericanas, según los expertos.
Goldfajn no mencionó en su discurso las tempestades en el sistema bancario, pero a su llegada a Panamá el miércoles dijo que los temas de “coyuntura” seguramente van a ser tratados en esta asamblea por los gobernadores, principalmente ministros de Finanzas, de los 48 países del BID.
“Hay siempre cuestiones coyunturales [que abordar], estamos en un momento donde el costo del dinero está subiendo en el mundo [...] y el costo del dinero siempre tiene impactos” sobre las economías, indicó el timonel del BID. Goldfajn recordó en su discurso de apertura que el BID ayudó con créditos a financiar la ampliación del Canal de Panamá (terminada en el 2016), vía crucial para el comercio mundial y motor de la economía de este país centroamericano.
Ayudas insuficientes
Los gobernadores tendrán reuniones a puertas cerradas el sábado y domingo, tras dos días de seminarios de expertos sobre lucha contra la pobreza, cambio climático, desarrollo sostenible y colaboración público-privada, entre otros. En el primero de estos seminarios, la economista del BID Ana María Ibáñez alertó el jueves sobre la necesidad de identificar bien a las personas más pobres en los países de la región, de modo de que la asistencia estatal llegue a quienes realmente lo necesitan.
“Hoy día 40% de los pobres extremos no están en la lista de los programas de asistencia a la pobreza en nuestros países”, expresó Ibáñez. “También tenemos un número importante de gente que no es pobre y está recibiendo programas por parte del Estado”, agregó la asesora principal de economía de la vicepresidencia de Sectores y Conocimiento del BID.
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Durante la asamblea, el candidato designado por el presidente estadounidense Joe Biden para dirigir el Banco Mundial, Ajay Banga, sostendrá reuniones con ministros y delegados latinoamericanos, informó el Departamento del Tesoro.
“Estas conversaciones se centrarán en los desafíos y prioridades de desarrollo en la región y cómo el Banco Mundial puede ser un socio crucial para reducir la pobreza”, dijo el Departamento. Tradicionalmente el candidato nominado por Washington se convierte en el nuevo presidente del Banco Mundial, organismo que también financia proyectos en América Latina y el Caribe.
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“Muchas demandas sociales”
El BID, creado en 1959 y con sede en Washington, es una de las principales fuentes de financiamiento a largo plazo para América Latina y el Caribe. Goldfajn ha afirmado que no es relevante la cantidad de créditos que la institución concede ni cuánto dinero presta, “lo que es primordial es el impacto de desarrollo tangible y mensurable”, declaró al asumir su cargo el 12 de enero. Este miércoles el jefe del BID expresó que la región debe resolver el “desafío” de atender “muchas demandas sociales con pocos recursos”.
Las turbulencias en el sistema bancario de Estados Unidos y Europa llegan en un momento complicado para América Latina y el Caribe. La deuda total de la región aumentó a 5,8 billones de dólares, equivalente a 117% del PIB regional, desde menos de 3 billones en el 2008, reveló el BID, que considera preocupante esta tendencia.
Goldfajn ha destacado que en las últimas dos décadas la región ha crecido 12 veces menos que los países asiáticos emergentes, y en los cinco años anteriores a la pandemia sus economías se contrajeron, cuando prácticamente todas las demás crecían.
Fuente: AFP.