Ciudad del Este. Agencia Regional.
Para el 13 de diciembre pasado estaba marcada una nueva audiencia preliminar en el juzgado de Cinthia Garcete Urunaga, para los once policías acusados por el Ministerio Público por homicidio doloso, causa número 16.416, pero de nuevo fue suspendida, por un parte médico presentado por uno de los policías afectados.
La causa es conocida como “gatillo fácil” teniendo en cuenta que en una balacera efectuada por policías de Investigación y del Grupo Especial de Operación (GEO), hacia un automóvil, con sus dos ocupantes, derivó en la muerte de una pareja: Alex Enrique Alejandro Ortiz Estigarribia (21) y Gloria Yetsica Espínola Cáceres (30).
Familiares y amigos de las víctimas se manifestaron frente al Palacio de Justicia de Ciudad del Este, exigiendo la pena máxima, justicia y castigos para los once policías. Ambas víctimas son del distrito de Domingo Martínez de Irala, sur de Alto Paraná y desde esa comunidad llegaron a Ciudad del Este sus vecinos y familiares para la audiencia que, al final, fue suspendida. Esto molestó mucho a los manifestantes.
El abogado Mauro Barreto, en representación de la familia de Gloria Espínola Cáceres, dijo que “ya está siendo toda una joda” y recordó que desde un principio está denunciado “las maniobras existentes y la jueza Cinthia Garcete se presta para que finalmente quede impune el doble homicidio”. Explicó que el reporte médico de un policía impidió que se realizara la audiencia, cuando pudo haber continuado para los otros diez acusados.
Asimismo, dijo que los policías están acusados y se encuentran con arresto domiciliario, pero “no debieron recuperar su libertad”. “Ahora, buscan que la causa no sea elevada a juicio oral porque saben que en el mismo saldrán las pruebas que los incrimina y se mostrarán las evidentes contradicciones en las que cayeron en su intento de justificar lo que hicieron”, agregó.
Los once policías acusados son: el comisario Hugo Regis Florentín (50), el subcomisario Manuel Ramón Villalba Gómez (41) y el suboficial principal Richard Antonio Sebriano Silvero (45), quienes prestaban servicios en el Departamento de Investigación de Delitos de Alto Paraná. La causa está a nombre de “Richard Antonio Sebriano y otros”.
También fueron acusados el oficial primero Roberto Samaniego Parquet (32) y los siguientes suboficiales: César González Agüero (24), Javier Antonio Martínez Ocampos (29), Alfredo Villalba Agüero (26), Rubén Darío Giménez Maidana (41), Jaime Javier Ramírez Brítez (33), Alder Centurión Céspedes (35) y Pedro Osvaldo Brítez Achar (35), quienes cumplían funciones en el Grupo Especial de Operaciones (GEO).
Es de mencionar que Gloria Espínola Cáceres falleció casi tres meses después de haber sido baleada por los policías, tras una estadía por hospitales de Ciudad del Este y Asunción. Finalmente no pudo resistir las heridas que le causaron los disparos. Los policías estaban buscando supuestamente a un prófugo de la justicia y dijeron haber disparado al automóvil acribillado porque el conductor disparó hacia ellos.
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