María del Puerto Bellassai, esposa de Diego Sosa, uno de los principales operadores de la pareja de excandidatos de la Concertación Soledad Núñez y Bruno Defelippe, es una de las oenegeístas leales a la pareja que se acomodaron en puestos clave del Estado durante el pasado gobierno. Del Puerto se ubicó en la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat, donde se encargó de gestionar las adquisiciones con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), una de las fuentes de financiamiento preferidas para las distintas oenegés vinculadas al clan Núñez-Defelippe.

Unidad de Investigación, Nación Media

Mientras la excandidata de la Concertación Nacional y extitular de la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hátibat (Senavitat), Soledad Núñez, realiza críticas a través de sus redes sociales sobre supuestos casos de nepotismo, salta que varios leales suyos fueron beneficiados con cargos dentro de su administración en sus tiempos como ministra de la Vivienda.

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Un ejemplo de esto es María Alejandra del Puerto Bellassai, esposa de Diego Sosa Maciel, cofundador de la ONG Alma Cívica junto a Núñez, quien se acomodó en la Senavitat entre los años 2016 y 2018, es decir, el período en el que Núñez se desempeñaba como titular de esta institución, y a partir de 2019, ya durante el gobierno del expresidente Mario Abdo Benítez, se pasó a la nómina del Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación (Mitic), donde se le registraron remuneraciones hasta el 2022.

Durante ese tiempo en Senavitat, Del Puerto se desempeñó en cargos de coordinación gestionando procesos de adquisiciones con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y en el Mitic continuó administrando los proyectos financiados con préstamos del BID, como el Programa de Apoyo a la Agenda Digital con salarios, que en conjunto con sus bonificaciones rondaban los G. 15 millones, según registros de la Secretaría de la Función Pública de abril de 2020. Coincidentemente, el BID es una de las fuentes de financiamiento preferidas para las distintas organizaciones vinculadas tanto a Núñez como a su esposo, el excandidato al Senado Bruno Defelippe.

Vale recordar que la pareja de candidatos Núñez-Defelippe industrializa una serie de organizaciones, algunas empresas y otras denominadas “sin fines de lucro”, pero que finalmente les sirvieron para recibir miles de dólares del extranjero a través de proyectos públicos con los que mueven fortunas sin pasar por los filtros de entidades de control como la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas, como son Alma Cívica, Koga Impact Lab, Sistema B, entre otros.

Sosa Maciel es cofundador y “observador” de la ONG Alma Cívica

LEALES ACOMODADAS

Otras operadoras de la pareja de excandidatos que se ubicaron en el Estado durante la gestión de Núñez son Leticia Bordón Medina y Aurora Escurra Chamorro. Escurra fue subdirectora en la ONG Techo Paraguay junto con Núñez y se incorporó a la Senavitat en el 2017 como coordinadora adjunta del programa Che Tapŷi. Al igual que Del Puerto, pasó al Mitic en 2019, institución donde ocupó el cargo de directora general de Gabinete hasta julio del año pasado con un ingreso mensual de G. 22,7 millones, y donde actualmente continúa como profesional de la Dirección General de Gabinete.

Por su parte, Bordón, que figura como miembro de la red de mentores de la empresa de Defelippe, Koga Impact Lab, se acomodó en la administración de Núñez en la Senavitat en 2015 como coordinadora del proyecto Sembrando Oportunidades y Che Tapŷi, hasta 2018, y para 2019 también pasó al Mitic primeramente como coordinadora general de Finanzas del Mitic y más adelante en el cargo de directora general de Innovación Productiva y Economía Digital con el que percibía remuneraciones que superaban los G. 17 millones hasta 2021 y luego disminuyó porque fue a estudiar al exterior, pero el Estado le siguió pagando sueldos de G. 6,6 millones y permaneció como una profesional del Departamento de Inclusión Digital hasta diciembre pasado.

Tanto Núñez como Defelippe criticaron fuertemente el clientelismo político durante la pasada campaña electoral y continúan poniendo en duda la ética y moral del actual gobierno, sin embargo, se desentienden de la serie de cargos privilegiados que fueron otorgados a sus leales tanto en tiempos de Núñez como ministra de Senavitat, como durante el gobierno del expresidente Abdo Benítez.

María Alejandra del Puerto fue nombrada en la Senavitat durante la administración de Soledad Núñez
Soledad Núñez, exministra de Senavitat

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