El concurso que tiene previsto cerrar ciclo de entrevistas en un par de semanas continúa generando críticas, así como nombres de algunos favoritos que están como finalistas sin obtener el puntaje mínimo establecido en los exámenes. A la par, siguen apareciendo más nombres de parientes, amigos, funcionarios amigos de la casa como virtuales ganadores. Miles de desempleados se entusiasmaron en competir, pero se encontraron con el boicot y quedaron en el camino.

  • Unidad de Investigación Nación Media

La última fase del con­curso para contrata­ción de personal en Itaipú Binacional está en marcha y se prevé que las entrevistas culminen en 15 días más, esto en medio de incesantes denuncias, críti­cas por la serie de irregula­ridades que realiza la ciuda­danía.

El rango etario exigido para sus participantes que no supera los 35 años, la fle­xibilización selectiva de las reglas del concurso, la extensión de fechas límite para completar documen­tos y la presencia de al menos una treintena de aspirantes “favoritos” detectados, fun­cionarios ya acomodados dentro de la binacional vie­nen siendo muy cuestionados por los aspirantes y la socie­dad en general.

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Otros cuestionamientos del concurso son los requisitos que fueron ajustados, ya que parecían estar preparados prácticamente a la medida de participantes allegados a los jefes de la binacional, como se vio, por ejemplo, en el cargo para “gestor de turismo-ar­quitecto” en el que se requería que los postulantes además del título de arquitecto, cuen­ten con diplomado en gestión de proyectos turísticos sus­tentables.

Coincidentemente, quien cumplía con todas las exigen­cias para el cargo y ahora está entre los finalistas del con­curso es Liz Tatiana Aquino, aspirante al referido puesto que ya se encuentra trabajando en la binacional a cargo del superintendente de Turismo, Juan Manuel Azuaga. Un dato no menor es que a su vez Azuaga es presidente del Ins­tituto Fundación Ambiental, donde se dicta el referido diplo­mado exigido para el cargo que busca Aquino.

Nuestro medio identificó a familiares de los jefes de la binacional en la lista de los miles de participantes que se anotaron para concursar por uno de los 220 cargos vacantes promocionados por la Itaipú. Uno de ellos es Mauricio Andrés Leguiza­món, aspirante finalista del concurso e hijo del jefe del Departamento de Ingenie­ría de Seguridad y Medicina del Trabajo, Ángel Andrés Leguizamón. Además de Mauricio, fueron identifi­cados otros 34 finalistas muy bien conectados que están a un paso de conse­guir uno de los puestos que inicialmente estaban dirigi­dos para “nuevos trabajado­res”. (Ver infografía)

Otra queja es sobre la supuesta flexibilización selectiva de las reglas del concurso, como la admisión de finalistas sin los títulos requeridos en las exi­gencias de vacantes. Un ejem­plo de esto es el caso de Bianca Araceli Sosa, finalista para el cargo de “gestor de contratos” que fue denunciada ante la Superintendencia de Recur­sos Humanos de la entidad, por supuestamente no con­tar con el título exigido para el puesto.

Según el reglamento publi­cado por la binacional, los 660 finalistas seleccionados luego de los exámenes escri­tos debían presentar en las ofi­cinas de la entidad sus docu­mentos de forma física hasta el pasado 23 de junio, fecha límite que fue postergada en detrimento de las normas del concurso.

JUZGADO PONE TRABAS AL AMPARO PRESENTADO POR GREMIO DE ABOGADOS

El amparo constitucional presentado por el gremio Auténticos Aboga­dos del Paraguay (AAP) para frenar el cuestionado proceso de selec­ción de personal de Itaipú fue rechazado por el juzgado por “no justifi­car la personería”.

“El juzgado mintió en su resolución al manifestar que los accionan­tes no tienen personería para promover el amparo”, sostuvo el abo­gado Juan Prieto, presidente del AAP.

El abogado sostiene haber incluido los documentos de la persone­ría jurídica de su gremio junto con el amparo mencionado y en la tarde de ayer presentó un recurso de apelación para rever la resolu­ción del juzgado.

La apelación quedó a espera de la aprobación del juez Martín Acosta Conde, quien debe dar trámite en el transcurso del día.

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