Una de las grandes acertadas del gobierno de Éber Aquino al frente de la Comisión de Árbitros de la APF fue darle la oportunidad a Zulma Quiñónez, de 37 años, quien se constituyó en la primera jueza en actuar en un partido de Primera División masculina.

Zulma debutó el 29 de mayo en el encuentro que Guaireña y Guaraní empataron 2-2, en el estadio Parque del Guairá, en el marco de la fecha 20 del torneo Apertura, marcando un hito en la máxima categoría al convertirse en la primera árbitra principal en impartir justicia en un partido del torneo de la Primera División y tuvo un estreno consagratorio, actuando con sobriedad y personalidad.

La segunda presentación de Quiñónez en el torneo de Honor se registró en la fecha 22 y última ronda del Apertura, cuando fue juez principal del encuentro que Trinidense le ganó 2 a 1 a Nacional, cumpliendo otra destacada actuación. Pero lo que más resaltó en las apariciones de Zulma fue que con su presencia se acabaron para los jugadores la manía de mano sear al juez cuando creían que una decisión era incorrecta. Se podría afirmar entonces que la aparición de Zulma trajo paz en nuestro fútbol.

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Que las promociones arbitrales de mujeres en el fútbol masculino de primera no terminen en Quiñónez y pueda haber muchas otras árbitras que tengan un nivel respetable, de modo a que tengan la oportunidad de ser designadas en cada fecha de la competencia principal.

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