Si bien la vitamina C es el mejor aliado durante el otoño e invierno para reforzar las defensas y prevenir los resfríos y la gripe, también es un nutriente por excelencia para revertir la piel opaca y reducir las arrugas. Como posee altas propiedades antiinflamatorias, incluso ayuda a aliviar algunas afecciones, como el acné.

La vitamina C no es un activo nuevo en la industria de la belleza, pero sí es uno de los más famosos en la actualidad gracias a los entusiastas del cuidado de la piel. Este nutriente soluble en agua es un antioxidante que combate los radicales libres, es decir, aquellos que dañan la piel cuando se encuentran con fuentes externas como la contaminación del aire.

Se trata de uno de los mejores ingredientes antienvejecimiento que activa la síntesis de colágeno, una proteína necesaria para la regeneración de la piel. Varias investigaciones científicas respaldan que su uso diario ayuda a prevenir y reducir las líneas de expresión y las arrugas. Incluso, se destaca como un reparador epidérmico, que alivia las cicatrices como las del acné, ayuda a tener un tono más uniforme, aporta luminosidad, minimiza irritaciones y defiende a la piel de las agresiones externas.

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Esta vitamina hace más efectiva la absorción de las cremas y llega hasta las capas más profundas de la piel. Como resultado, deja una tez más lisa y saludable. Sus beneficios se pueden obtener a través de la dieta, el uso de sueros y otros productos tópicos de aplicación más directa.

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La vitamina tiene la capacidad de llegar hasta las capas más profundas de la piel. Foto: Ilustrativa

¿Cómo usar vitamina C para la piel?

Las fuentes más fáciles de vitamina C son las frutas y verduras, pero esa no es la única forma de disfrutar de sus bondades. Cuando se agrega a los productos para el cuidado de la dermis, se sabe que tiene un efecto significativo en la salud de la piel, ya que es más efectivo al aplicar que al consumir.

Entonces, aquí te compartimos tres formas más importantes de usar la vitamina C para mejorar la piel.

1. Mascarilla facial con polvo de vitamina C

En un recipiente mezcla 2 cucharadas de polvo de vitamina C, 1 cucharada de aceite de almendras y agrega agua para hacer una pasta suave. También puedes usar suero de vitamina C en lugar de agua, aplicar la solución en tu rostro y dejarla actuar durante 15 minutos. Luego, debes lavarte la cara con agua fría.

2. Suero casero de vitamina C

Mezcla 2 cucharadas de agua de rosas con 1 cucharada de gel de aloe vera, hasta que quede homogénea. Después, tritura 2 tabletas de vitamina C, agrega 1 cucharada de glicerina y corta 1 cápsula de vitamina E. La mezcla debe permanecer en la heladera por un día hasta que todos los ingredientes se hayan disuelto y mezclado bien.

Para usarlo, aplica por las noches. Primero, limpia tu rostro y luego masajea suavemente el suero en tu rostro y cuello. No frotes en exceso, deja que sea absorbido por tu piel y lávate la cara por las mañanas.

3. Alimentos ricos en vitamina C

Incluye estos alimentos ricos en vitamina C en tu dieta regular para dar a tu piel un brillo saludable de adentro hacia afuera. Se recomiendan las frutas cítricas como naranjas, kiwis, limones y toronjas, más fresas, pimiento y tomate, también las verduras crucíferas como el brócoli, repollo y coliflor.

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