Por Yvelice Villalba M.
Los paisajes de la región de Antofagasta, al norte de Chile, son únicos en el mundo. A pesar de su aridez, cada rincón enseña parte de la historia de la humanidad, por un lado a través de sus diferentes rocas que se observan desde su costa hasta las cumbres volcánicas en su desierto, sus altiplanos y sus inmensos yacimientos de minerales, y por otro lado, el océano Pacífico, que contiene una diversidad de fauna y flora en sus lechos.
La región, más conocida como la Perla del Pacífico, se ha posicionado a nivel mundial por su producción minera, astronómica y energética, pero que en los últimos años ha emergido como un destino turístico atractivo, con identidad propia que ofrece los paisajes naturales más hermosos del mundo, como sus montañas, valles, sus cielos limpios, su amplio borde costero, sus playas apacibles, su gastronomía variada, su historia salitrera y la calidez de su gente.
Con el concepto “Chile naturaleza abierta”, el gobierno regional a través de Sernatur, invita a conocer el extenso desierto. Gracias a un Fam Press, ofrecido por la compañía de Líneas Aéreas Amaszonas, un grupo de periodistas hemos visitado los sitios más representativos de la región. Desde Asunción, Paraguay podemos tardar unas 3 horas y media para llegar a Antofagasta, con previas pequeñas escalas en Salta (Argentina) e Iquique (Chile).

ARCO DE CAPRICORNIO
Uno de los primeros sitios que conocimos fue el Arco de Capricornio, un lugar que queda a pocos kilómetros del aeropuerto Cerro Moreno y a 28 km de la ciudad de Antofagasta. El hito es donde se marca el día y la hora exacta en que se produce el solsticio. El monumento está compuesto por cuatro estructuras, entre las que se destacan el Arco de casi 11 metros de altura, cuyo borde sirve para marcar las estaciones del año.
“El sitio se ha trasformado en una de las mayores atracciones turísticas de Antofagasta y es el principal centro de encuentro en las noches de verano para los amantes de la astronomía”, indicó Carlos Alvarez, nuestro guía en el lugar.
Esta misma línea del Trópico pasa por Paraguay, en el distrito de Belén, Concepción, donde también se encuentra un hito.
LA PORTADA
El segundo lugar visitado fue el monumento natural La Portada, un lugar maravilloso visualmente y muy visitado por los turistas. El portal de piedras ha sufrido erosiones a lo largo de los tiempos y aun permanece mediante una colonia de aves que se anidan en el lugar, cuyas heces sirven como protección, según nos explicó el geólogo Carlos Alvarez.
En el lugar se avistan lobos marinos y delfines, y varias aves como las gaviotas, el jote o gallinazo y otros.

LA CIUDAD
La ciudad de Antofagasta, antiguamente denominada por los Changos como Antofagasti (‘Puerta del Sol’), es la capital de la región que lleva el mismo nombre. Es uno de los puertos y zona franca más importantes de la zona norte de Chile. Cerca del puerto se encuentran los edificios históricos y la Plaza Colón, la principal, que alberga monumentos importantes, que fueron donados por las colonias que se asentaron en la región en 1911 con motivo del centenario de Chile, como la Torre Reloj, una donación de la colonia británica; el Kiosco de Retreta, donado por la colonia croata; y La Estatua a España y América, construida por la colonia española. La plaza se encuentra en el paseo peatonal Arturo Prat y es bastante visitada por turistas y habitantes de la ciudad. Una de las tradiciones que se le dice al turista es pasar por el kiosco, sino uno desea volver a Antofagasta. Alrededor de la plaza se encuentra un templo parroquial, un museo, la estación de trenes, lo que fue el cuartel de policía y otros edificios históricos. Luego, a unas cuadras, cruzando la avenida principal, uno ya se encuentra con el puerto de la ciudad, que fue inaugurada en 1869 como uno de los puntos importantes para la explotación del salitre. Ya casi después de 70 años se modernizó y cerca de ella actualmente se encuentra la playa municipal y un paseo donde la gente camina al atardecer. Posee una de las vistas más hermosas de la ciudad cuando el sol baja e ilumina las aguas tornándose dorada y plateada.
A pasos del muelle se encuentra el Mall Plaza, donde uno puede comprar o tomarse unos tragos en coquetos locales gastronómicos instalados en el lugar. Un espacio recién inaugurado es el restó Koh, de comida tailandesa, donde recibe a bandas musicales de distintos ritmos que amenizan el lugar.
GASTRONOMÍA
Los locales gastronómicos están concentrados cerca del muelle con diversas opciones de sabores y tragos y propuestas musicales. Algunos de los locales que visitamos fueron Donde Mauro II, un nuevo restó que ofrece la auténtica comida peruana. Su dueño Mauro Zarate, peruano, dirige su local con un concepto de la alta gastronomía internacional, la cocina está abierta al público y ofrecen los mejores pescados y frutos de mar de la zona, como pulpos asados, ceviche a la casa y otros. Otro bar que visitamos es El Nomades, un espacio con onda ecológista, donde se promociona el uso de bicleta para ofrecer promociones. Allí se brindan las mejores cervezas artesanales y pizzas.
Otro de los lugares donde se ofrece los mejores cortes de carne vacuna y pescados es el restó Aurora, cuyo local posee un bar en la terraza, que se abre de noche, donde el barman prepara los tragos macerados más exóticos y exquisitas picadas a base de frutos de mar y otros sabores como las empanaditas sorpresa. El espacio es amenizado con buena música. En la misma cuadra se encuentran otros bares como Toro Bravo, un karaoke, visitado por muchas parejas y grupos de amigos, y para bailar se encuentra el pab After Bar.

PLAYAS
La ciudad de Antofagasta posee tres playas artificiales, que se pueden usar incluso de noche. “Nuestra ciudad tiene todo lo que un visitante necesita, buenos hoteles, playas artificiales, excelente gastronomía y actividades de deporte extremo. En nuestra ciudad se suele hacer el campeonato Mundial de Bodyboard (deporte basado en el deslizamiento sobre la superficie o pared de la ola con una tabla). Esperamos que los paraguayos que vienen a esta región puedan quedarse unos días y disfrutar de todo lo que tenemos. También pueden visitarnos en familia para conocer esta región que se caracteriza por su belleza y hospitalidad. De hecho nuestra país tiene una relación fuerte con Paraguay, a través del Puerto de Mejillones, donde el gobierno de Chile había donado una propiedad para ampliar su zona portuaria ”, señalò Claudio Yañez Salazar, director regional de Sernatur.
MUSEO
Antofagasta también posee uno de los museos arqueológicos más importantes de la región, que se encuentra frente a las Ruinas de Huanchaca, que son vestigios de una antigua fundición de plata, que inició sus actividades en 1893 y se cerró en 1902. Fue declarado Monumento Histórico Nacional, y su explanada es utilizada como un centro cultural, donde se realizan importantes recitales. Ya pasaron por su escenario grandes artistas como Luis Miguel y otros.

LA MANO
Otro de los sitios que visitamos es La Mano del Desierto, una escultura ubicada a 75 km al sur de la ciudad de Antofagasta, a un costado de la ruta 5 Panamericana. Fue construida en 1992 por el escultor chileno Mario Irarrázabal, a 1.100 msnm, posee una altura de 11 metros. Allí, en horas de la noche se puede observar el cielo más estrellado y ver a simple vista las constelaciones. En astronomía, una constelación es una agrupación convencional de estrellas, cuya posición en el cielo nocturno es aparentemente invariable. Los pueblos, generalmente de civilizaciones antiguas, decidieron vincularlas mediante trazos imaginarios, creando así siluetas virtuales sobre la esfera celeste.
El mismo artista ha realizado esculturas similares en en las arenas de la playa Brava de Punta del Este (el monumento de la Mano de Punta del Este) en 1982, en el Parque de Juan Carlos I de Madrid, en Puerto Natales, y en Venecia.
“Cada visitante puede darle su propia interpretación a la Mano del Desierto. Algunos dicen que es la ciudad despidiéndose del viajero. Según otros, representa a las víctimas de la injusticia y la tortura durante la dictadura militar de 1973-1990. Es un punto de visita turístico para los viajeros que circulan por la carretera Panamericana”, cuenta Alexis Jaldín, nuestro astroguía.

TALTAL
Tatal (nombre de un ave de la región) que queda cerca de 300 kilómetros de la ciudad de Antofagasta, es un antiguo puerto donde se mezclan las historias, el mar, el desierto. Es un sitio maravilloso donde se respira una inmensa paz. Para llegar al lugar uno debe viajar en bus durante unas horas y en el trayecto se puede observar las diferentes formaciones rocosas. En una zona llamada Poposo, a 52 km antes de llegar a la ciudad, se encuentra un microclima donde salen hermosos cactus y plantas que en verano florecen dando un matiz maravilloso al lugar.
Fue el tercer puerto salitrero de Chile fundado en 1858 y habitado por inmigrantes griegos, alemanes y chinos. A final del siglo XIX y principios del siglo XX fue una de las ciudades más importantes de la zona norte de Chile, llegando a a tener 30 mil habitantes en su mejor época. El salitre le dio prosperidad a la ciudad hasta 1930. Durante esa época en la ciudad había consulados, siete muelles de embarque, cuatro de pasajeros. Luego de la creación del salitre sintético, en 1935, se cerraron las oficinas salitreras y los habitantes se trasladaron a otras ciudades quedando solo 6000 habitantes. “Entre sus pobladores famosos se recuerda al principe de Lieven Jorge Egbert Maximiliano Lieven”, comenta Sonia Vazquez, presidenta de la Cámara de Comercio de la ciudad.
Actualmente la ciudad cuenta con 17 mil habitantes, quienes viven del turismo y la energía renovable, además de algunas pequeñas y medianas minerías.
“Existen vestigios de que en estas tierras se desarrolló la cultura precolombina de Huentelauquén, hace más de 11.000 años. Sus habitantes ya se dedicaban la explotación minera con elementos rudimentarios, por lo tanto es la minera más antigua de Chile, América y el mundo hasta ahora conocida”, cuenta María José Hinojosa, promotora cultural de Cavancha Tour.
Agregó que antes de constituirse en un puerto vivían los changos, unos nativos que se dedicaban al tratamiento de cueros de lobo marino para la fabricación de balsas y también para uso de pintura corporal. “Cuando llegaron los conquistadores se encontraron con estas personas ´horrorosas´ porque estaban pintados de rojo, pero hasta ahora existe una pequeña comunidad que mantiene el algo la cultura de estos hombres”.
La pequeña ciudad se caracteriza por la herencia arquitectónica que dejó sus pobladores del siglo pasado como teatro, òpera y todas las actividades de una ciudad. En 1983, el ferrocarril fue declarado Monumento Nacional en reconocimiento al patrimonio arquitectónico de la comuna.
GASTRONOMÍA
En las caletas de la comuna se pescan los mejores congrios (peces muy apreciados por la gastronomía), posee hermosas y apacibles playas, donde se pueden pernotar en carpas. La ciudad cuenta con algunos hospedajes y restaurantes como El Rincón de Cormartt, que está en un sitio privilegiado, en la zona costera del puerto, con una vista increíble para disfrutar de los mejores vinos y platos a base del congrio.
A 32 kilómetros de la ciudad se encuentra una de las playas más hermosas de Chile, Cifuncho, un lugar apacible rodeado de un bello entorno desértico y una diversidad de fauna marina y aves. Allí está instalada una pequeña caleta de pescadores, donde se puede disfrutar de pescados y mariscos frescos, como los erizos, congrio colorado y otras exquisiteces. Próximamente se habilitará un restaurante, con todas las comodidades para disfrutar y hacer de su paseo una experiencia inolvidable.

MARÍA ELENA
María Elena es otra comuna que queda a 220 kilómetros de la ciudad de Antofagasta. Se puede llegar hasta esta pequeña ciudad en bus. Es la parte más árida de la región, donde solo se ve montañas y dunas, además de algunos sitios donde se generan la energía solar. También de vez en cuando aparecen los trenes de carga transportando el cobre y otros productos extraídos de las minerías de la zona.
Es una de las salitreras más importantes de su época, actualmente de sus minas se extraen yoduro y apunta a ser una de las zonas más importantes en la producción de energía termo solar. Desde mediados del siglo XX, el 60 por ciento de la producción salitrera se sacaba del lugar hasta el 2010. Actualmente sus pobladores desean convertirla en un polo turístico. Posee uno de los mejores museos, donde se cuenta paso a pasó la vida y evolución de las salitreras, sus pobladores antepasados (los atacameños), la vida de los pampinos. También el museo alberga vestigios del desarrollo de la cultura precolombina, como elementos de alfarería, de agricultura, de caza, de textilería y minería.
Según su historia, la primera compañía que se instaló en el lugar fue la compañía Anglo Chilean Consolidated Nitrate Corporation, en 1926. Precisamente, la ciudad lleva el nombre de María Elena, en honor a Mary Ellen Condon, esposa del primer administrador de la planta, Elías Cappelens Smith. En su mejor momento, las salitreras tenían una producción de hasta un millón de toneladas. En cada salitrera trabajaban unas 3.000 personas. La mayoría funcionó hasta el 2010 y actualmente quedaron algunas como minerías de caliche. El caliche posee varios elementos como nitrato de sodio, yodatos, sulfatos de sodio, sulfato de calcio, clururo de sodio y otros.
El terremoto del 2007 destruyó gran parte de las construcciones antiguas, quedando solo algunas, como la iglesia, el museo y otras construcciones. Las que quedaron, algunas fueron restauradas como la escuela de la ciudad, que hoy está convertida en museo y centro cultural de la región.
El clima de la región es de un desierto seco árido, las temperaturas son altas durante el día y la noche fresca. Su gastronomía se basa en lo que llevan los caravaneros, como granos, cebollas, pimientos, charque y quesos.
Uno de los lugares que ofrece estos platos es el bar Intikuyen (que significa sol y luna en Mapuche), un espacio decorado con pinturas y graffittis que representa la historia del lugar. Además brinda presentaciones de grupos musicales con onda rockera.

MEJILLONES
Mejillones es otra ciudad que queda a 65 kilómetros al norte de la ciudad de Antofagasta, donde se encuentra la zona franca más grande de la región. En la zona se encuentra uno de los puertos donados a Paraguay para transportar los productos provenientes de Asia.
Según su historia, las primeras manifestaciones del crecimiento económico en la ciudad empezaron en los años 80, con el funcionamiento de las plantas procesadoras de harina de pescado (Guanaye, Angamos y Loa), la ciudad se vuelca a la actividad pesquera.
La ciudad posee hermosas playas y varios locales gastronómicos para disfrutar de los frescos pescados. Uno de los lugares que visitamos fue el Casino Municipal de Mejillones, que ofrece la mejor forma de preparar el apanado, un pescado propio de la zona.
Un paseo por la costa con las embarcaciones del Club de Yate de Antofagasta es una de las actividades más hermosas y placenteras que uno puede hacer en esta ciudad, porque a parte de disfrutar de la brisa del mar, uno puede divisar varias aves, hasta pinguinos que existen en la zona, y también visitar uno de los de lugares donde se crían los lobos marinos. Además en el lugar se avistan ballenas, delfines, orcas y otros animales marinos. El paseo puede durar medio día o si desea realizar pezca a 60 km en alta mar puede contrar el servicio de las embarcaciones por un día.
Desde mi experiencia, con la embarcación Misty, al mando de Cristian Guerra, ha sido uno de los paseos más hermosos por las aguas del Pacífico.
Desde el puerto, la Capitanía de Puerto se ha transformado en una de las postales más significativas de la ciudad. Su construcción data de 1910 y se enmarca dentro del plano de la nueva ciudad de Mejillones. Una ciudad que merece ser visitada por su belleza y atractivos.
Contactos: infoantofagasta@sernatur.cl; www.chileestuyo.cl. Telef. (5655)2451819.