Si no tenés tiempo para ir al gimnasio o hacer alguna que otra rutina de ejercicios, aplicá estos consejos que te ayudarán a levantarte y moverte para mantenerte en forma.

Hay tantas razones por las que deberías moverte más en tu vida diaria, pero para algunas personas puede ser más difícil que otras por las tantas responsabilidades que tienen. Entonces, practicar algún deporte o hacer ejercicio todos los días de la semana no es una opción válida.

Y la pregunta es cómo incorporar formas de moverte más cuando tienes demasiadas cosas que hacer. No hay una sola forma, sino varias que pueden ayudarte a estar más en movimiento en tu día a día, sin hacer el esfuerzo de ir al gimnasio.

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1. Camina y habla. Ya sean conversaciones telefónicas o en persona, cuando tengas que hablar con alguien, caminá. Esto te ayudará a mantener un peso saludable, reducirá el riesgo de enfermedades cardíacas, fortalecerá tus huesos, aumentará los niveles de energía, aumentará la inmunidad y reducirá el estrés.

2. Usa las escaleras. Si bien es posible que lo hayas escuchado miles de millones de veces, es una de las formas más efectivas de moverte más en tu vida cotidiana. Cuando usas las escaleras, aumenta tu frecuencia cardíaca y mejora tu fuerza general.

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3. Baila para ponerte en forma. Siempre que tengas tiempo, hacé un movimiento para mantener tu cuerpo en movimiento. Una de las mejores cosas de bailar es que no se siente como ejercicio. Por lo tanto, la próxima vez que sientas que debes moverte más y hayas estado sentada durante demasiado tiempo, suéltate durante unos minutos para que tu cuerpo se mueva.

4. Hacé de tu viaje diario un tiempo para ejercitarte. Cuando te movilices en transporte público, bájate al menos a 10 a 20 minutos antes para caminar. Si vas en auto o moto, estaciona un poco más lejos y camina. No uses el ascensor, anda por las escaleras y tratá de incorporar pequeños cambios en tu vida para asegurarse de caminar más y mantenerte en forma.

5. Ejercitate o estirate mientras estás en la oficina o ves la televisión. La próxima sesión de Netflix podría incluir caminar en una caminadora, hacer spinning o algunos estiramientos, probar ciertos movimientos de pilates o incorporar otro tipo de ejercicio. Estirarte en tu escritorio también puede ayudar a mejorar el flujo sanguíneo y la circulación. Además, ayudará a mejorar la salud de la columna vertebral y tu flexibilidad.

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