La ex ministra de la Mujer, María José Argaña, reconoció que para las mujeres es difícil dedicarse a la polí­tica partidaria. Indicó que se trata de una profesión “muy criticada” indepen­dientemente al género, porque cada paso que se da es muy observado y juz­gado.

Indicó que para que las mujeres ganen ese espacio político ha sido mucho más difícil, porque fue un espa­cio que por muchos años ha sido dominado por el hombre y por más que se demuestre capacidad, no han cedido con facilidad.

“Ser político no es fácil y ser político mujer es mucho más difícil. Y si no sos un buen político y no amás lo que hacés y no tenés patriotismo y amor por el país es difícil. Como mujeres, históricamente sabemos que el poder ha estado en manos de hom­bres y la política no es un espacio diferente”, expresó durante una entrevista por radio Ñanduti.

Indicó que por más demo­cráticas que sean las elec­ciones los pasos son difí­ciles y en las campañas políticas de las mujeres es donde van quedando relegadas. “Es un colador, porque para financiarnos no tenemos las mismas opciones que los hom­bres. Es una carrera difí­cil, pero demostramos que tenemos capacidad, que podemos trabajar igual y complementarnos con los hombres, en un trabajo de amor por el país, y amor por lo que hacemos”, afirmó.

Argaña señaló a grandes ejemplos de mujeres polí­ticas como Ángela Merkel, actual canciller y ex pri­mer ministro de Alema­nia; así como también la presidenta de la República de China (Taiwán) Tsai Ing-wen; o la mandataria de Finlandia, la primera ministra más joven de la historia Sanna Marin, quien ganó una gran popu­laridad con el manejo de la pandemia.

“Hemos demostrado que tenemos capacidad, tene­mos esa cualidad de hacer empatía con la gente, de entender la parte emo­cional, y nos complemen­tamos con la sociedad y sobre todo el mundo nece­sita de nuestra mirada y nuestro trabajo induda­blemente”, expresó.

Por otra parte, la ex ministra Argaña señaló su preocupación por la situación de la pandemia y el manejo de las inversio­nes a largo plazo, respecto a esa imagen país que se está dando al extranjero. “Hablando de las dificul­tades y desafíos, puedo decir que estoy preocu­pada no solo como polí­tica, sino que en lo perso­nal me siento defraudada en muchos aspectos por el gobierno actual, porque no está dando la respuesta a la gente, y todo lo que es la inseguridad, desigual­dad e inestabilidad polí­tica, es grave todo esto y preocupa seriamente”, expresó.