La zona fronteriza mueve aproximadamente unos US$ 2.000 millones, que en las recaudaciones totales representan cerca del 30%, cuyas transacciones fueron bruscamente afectadas por la pandemia y con el cierre de las fronteras, por lo que se espera que con la reapertura puedan repuntar los ingresos.
Es lo que señaló el viceministro de la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), Óscar Orué, en contacto con Universo 970 AM y GEN, ya que tras 7 meses de estar parada la actividad fronteriza, se espera que la demanda del consumo aumente.
Esto se irá percibiendo mejor con el paso de los días y dependerá mucho de la internalización de los cuidados, lo cual hará posible que la demanda aumente, que esperan se pueda dar de una manera proactiva, ya que la participación de la zona del Alto Paraná en las recaudaciones totales se estima entre un 10 y 12%, y toda la zona fronteriza en su conjunto, al menos un 30%.
“Creemos que va a tener un impacto positivo, especialmente lo que corresponde al régimen de turismo, el cual está vigente en la zona fronteriza y que ya había registrado medidas paliativas como la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) al 1% y que estará vigente hasta el 31 de diciembre, y esperamos que estos tres meses se pueda aprovechar bastante y se reactive el comercio fronterizo”, expresó.
Explicó que en el régimen de turismo, el comprador brasileño que cruza tiene que cumplir con ciertas reglas como el registrarse para acceder a los impuestos más bajos, que a más del IVA también había sido reducido el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) para electrónica un 50%, muy demandado en la zona, al igual que las bebidas alcohólicas como el whisky y el vino, cuyo impuesto bajó del 11 al 7%.