Gran parte de las denuncias en contra de jueces y fiscales no tienen fundamento, incluso algunas son utilizadas para amedrentamientos, sostuvo el presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), Cristian Kriskovich. “La gran mayoría de las causas no tienen mayores sustentos para un enjuiciamiento. Se utiliza al JEM, no solo como un amedrentamiento, sino como un recurso procesal”, afirmó a la radio 780 AM.
Alegó que las acusaciones también tienen que ver con diconformidades con los fallos de los representantes de la Justicia y no aportan pruebas concretas, que son los que necesita el colegiado para poder proceder en consecuencia. “Concurren al Jurado esperando una respuesta que lamentablemente el Jurado no puede dar. Muchas de las denuncias se fundamentan por discrepancias con las decisiones tomadas por los juzgados y tribunales. Son esos casos los que en su gran mayoría están siendo archivados”, manifestó.
En otro momento expresó que se recurren a esa herramienta para conseguir una recusación y aclaró que en esos casos se trata de un ejercicio abusivo del derecho o mala fe. Ese tipo de situaciones son derivadas a la Corte Suprema de Justicia para que sus miembros tomen las medidas que crean convenientes, precisó. Kriskovich se refirió al caso que involucra a los fiscales Igor Cáceres y Nadine Portillo, quienes fueron suspendidos en sus funciones. “Igor Cáceres fue enjuiciado con suspensión en el marco revelado mediante los audios filtrados en la causa conocida como secta Moon. Cabe aclarar que los audios son solo un indicio y lo que vale es lo que está en la carpeta”, puntualizó.