La bancada del PPQ anda cometiendo errores infantiles. Al parecer no saben todavía dónde se fueron a meter y caen en todas las trampitas que le ponen el Monseñor y sus compinches. Resulta que Fidel, al parecer, cree en la buena fe del cura (nunca mejor llamado Monje Negro), y este lo tiene de hijo últimamente. Ya le hizo meter la pata varias veces en su visita al Congreso. Habrá que ir curándose en salud, si no van a empezar con el pie izquierdo estos tiernos muchachos.

Fidel y algunos patriaqueridistas andan también paveando con opiniones sobre la política exterior. Confunden diplomacia con "quedar bien con todos haciendo nada" y piden que se actúe de manera timorata. La fuerte decisión política del Presidente de apoyar a los aliados estratégicos, como son nada menos que los Estados Unidos e Israel, con una medida histórica de mudar la embajada a Jerusalem, es recibida con "miedo a represalias" por estos aficionados.

Basándonos en los criterios esgrimidos por Paz Castaign y otros, deberíamos ceder todo el Norte al EPP y dejar de plantar soja y criar ganado para que "no se enojen"… Claro que ese ya es negocio de varios pecusistas y mejor ni hablemos.