Ayer una comitiva fiscal policial realizó dos allanamientos en búsqueda de evidencias que conduzcan al paradero de la pequeña Juliette, desaparecida hace casi tres meses. Los operativos fueron en dos viviendas ubicadas en Atyrá y en Caacupé, en el departamento de Cordillera, de donde se incautaron de planillas y teléfonos celulares de uno de los propietarios.

Las dos casas allanadas pertenecerían a personas cercanas al padrastro de la niña, Reiner Helmut Oberuber. Los fiscales Gedeón Escobar y Lorenzo Lezcano encabezan los operativos que reiniciaron luego de casi 30 días la búsqueda de datos que permitan conocer qué sucedió con la niña. La investigación estaría relacionada con documentos y escuchas de teléfonos celulares incautados en allanamientos anteriores. Los agentes de la Fiscalía verificaron las evidencias que condujeron a la casa cuyo propietario es José Bernardino Vargas, quien sería socio comercial del padrastro.

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