El senador Fernando Lugo calificó que el proceso del caso Curuguaty estuvo “plagado de irregularidades” tras la absolución a 11 campesinos, a través de una Sala Penal de la Corte. Agregó que el hecho fue planeado para acusar a su gobierno por inseguridad y así lograr su destitución como Jefe de Estado.
“Ninguna de las pruebas tuvieron un asidero razonable que pueda justificar ningún tipo de condena. Creo que más tarde se verá que todo esto no era más que un golpe parlamentario. La justicia llega, pero tarde. ¿Quién les devuelve los años en prisión a esos compatriotas?”, expresó Lugo, en contacto con la 800 AM.
Lugo refirió que el caso fue el desencadenante del juicio político. Agregó que tuvo repercusiones políticas muy fuertes. “Resarcir va a ser muy difícil. Nadie da vuelta a la página para volver hacia atrás, pero sí aprender de la historia para que estos hechos nunca más vuelvan a pasar en nuestro país”, dijo Lugo.
Lamentó que existen innumerables casos sin esclarecimiento en Paraguay en su historia reciente. “Creo que todavía estamos a tiempo para entender lo que pasó en Curuguaty, que fue un montaje para justificar un así llamado juicio político y destituir al presidente de ese momento. Esto fue una reivindicación de la justicia de lo que ha pasado hace 6 años”, expresó Lugo.
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia integrada hizo lugar al recurso de casación y revocó la condena de los campesinos sentenciados por la masacre en Curuguaty. Se trata de Cristóbal Sánchez, Emiliano Rolón Fernández y Arnaldo Martínez Prieto, quienes votaron por la nulidad de la sentencia.
El abogado Jorge Bogarín González presentó el recurso extraordinario de casación, y manifestó que se hizo justicia a tres años de la lectura de la sentencia a los 11 campesinos.
La masacre de Curuguaty ocurrió el 15 de junio de 2012, en Marina Cué, donde el enfrentamiento dejó a 11 campesinos y 6 policías muertos. El hecho se dio en un operativo de desalojo en las tierras que supuestamente estaban a nombre de Blas N. Riquelme, pero que el Estado reclamaba como suya.
El caso derivó en un juicio político al presidente de la República de aquel entonces, Fernando Lugo, quien fue destituido como jefe de Estado.