La presidenta de la Cámara de Comercio de Encarnación, Mirtha Montiel, sostuvo que la zona se ve afectada por los cambios cicloeconómicos que atraviesa el país al igual que Argentina, teniendo en cuenta que el flujo de negocios disminuyó un 50% en los primeros meses del año.
Señaló que anteriormente llegaban a la zona encarnacena entre 20.000 y 22.000 turistas por fin de semana y en los días feriados, mientras que ahora el promedio se mantiene en 11.000.
“Estamos con una merma del 50% de las ventas, estamos pasando por un mal momento. Algunos comercios incluso cerraron, muchos de ellos habían venido a instalarse provenientes de Ciudad del Este, Asunción, por el auge de ventas que teníamos hace un año atrás”, expresó.
Acotó que hasta el año pasado ingresaban alrededor de unas 25.000 personas a través del puente en días de alta actividad comercial. “Hoy estamos hablando de unas 11.000 personas que cruzan hacia Encarnación pero sin mucho poder de adquisición ya que el dólar está subiendo en el país y eso afecta aún más a la economía en el vecino país. Aguantamos con los precios que mantenemos hace más de un año”, indicó. Al problema del bajón en las ventas que existe en la zona, la presidenta del gremio mencionó que también tienen problemas con el tren que une las ciudades de Encarnación y Posadas.
“No realiza el servicio que tiene que hacer. Ellos aluden que no tienen para pagarle a los aduaneros y la gente de Migraciones de Posadas. Muchas personas no vienen a Encarnación por falta del servicio. Desde mañana (por hoy) hasta el domingo el tren estará inactivo. Eso golpea a la economía encarnacena”, dijo.
Montiel agregó que ya mantuvieron reuniones con sus pares de Ciudad del Este, Pedro Juan Caballero y Salto del Guairá para formar la primera Confederación de Cámaras de Comercio Fronterizo del Paraguay. “Queremos pedirle al Estado flexibilización en las tasas impositivas, así como poner en marcha el régimen de turismo”, dijo.
Manifestó que precisan una respuesta por parte de la Fepasa, teniendo en cuenta que existe un contrato que no se está cumpliendo.