La misión del Fondo Monetario Interna­cional (FMI) para el Artículo IV presentó las prin­cipales conclusiones de su visita realizada al Paraguay, donde mantuvieron sendas reuniones con representan­tes de varios sectores, tanto públicos como privados.

“La economía de Paraguay sigue teniendo un buen desem­peño a pesar de un entorno externo menos favorable. Es probable que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca alrededor de 4,2% este año; la inflación, en torno al 4%, está cerca del punto medio del rango objetivo del BCP y la deprecia­ción del guaraní con relación al dólar este año ha sido modesta en comparación con otros paí­ses de la región”, comenzó diciendo Bas Bakker, represen­tante del FMI, en una confe­rencia de prensa brindada en la tarde de ayer.

Señaló que la tasa de crecimiento del Paraguay no sorprende al FMI, teniendo en cuenta que viene manteniendo el ritmo promedio desde el 2003. “Si bien el auge de los precios de los productos bási­cos fue un factor importante para generar un fuerte creci­miento, las políticas macroe­conómicas consistentemente prudentes también desempe­ñaron un papel clave. El com­promiso del nuevo gobierno de continuar adoptando políticas prudentes es, por lo tanto, alen­tador”, sostuvo.

Bakker indicó que la clave será cómo mantener el ritmo de cre­cimiento rápido. “Actualmente estamos pronosticando un 4% para el 2019 y muy similar para el medio plazo. La tasa de la política de 5,2% constituye un respaldo”, manifestó. El repre­sentante del FMI añadió que los acontecimientos externos (situación económica de Brasil y Argentina) presentan riesgos a la baja. “Paraguay ha demos­trado resistencia a recesiones pasadas de estos países”, dijo.

Sobre la gestión del nuevo gobierno, indicó que desde el FMI esperan que el mismo continúe con la prudencia mantenida por la adminis­tración saliente. “Nosotros realmente pensamos que este compromiso del nuevo gobierno de continuar con estas políticas macroeconó­micas prudentes y mantener los topes del déficit”, expresó.