Ciudad del Este. Agencia Regional.

En sus inicios fue cono­cido como el hotel de los turistas europeos en Alto Paraná. Hoy ya es un lugar de referencia tanto para el turista nacional como del exterior, al igual que para el sector corporativo. Se trata del Hotel Puma de Juan León Mallorquín, ubicado a 69 kiló­metros de Ciudad del Este, sobre la Ruta 7 "Dr. Gaspar Rodríguez de Francia". Man­tiene su perfil de ser un lugar muy visitado por europeos, especialmente daneses. El hecho no es casual. Sus propie­tarios son Jan Madsen (danés) y su esposa Beatriz Urán Mad­sen (paraguaya), quienes deja­ron Dinamarca y se instalaron en Alto Paraná. En el caso de Beatriz vivió muchos años en el país europeo.

El negocio del turismo es lo que les atrajo y empeza­ron como agentes de viajes e incluso guías de turismo, mediante una empresa creada por la pareja, Paraguay Via­jes, que tiene una agencia en Dinamarca. Haber vivido en ese país les permitió abrir el mercado para atraer gente hacia el Paraguay, explica Beatriz Madsen a La Nación. La creciente demanda hacia el turismo de naturaleza les llevó a invertir en la compra de un viejo predio donde fun­cionaba un seminario católico y era de la Diócesis de Ciudad del Este que la puso en venta.

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La inversión fue de 1 millón de dólares y reconvirtió la vieja estructura en un edificio cómodo, en medio de mucho verde y aire de pueblo, como les gusta a los daneses y euro­peos en general, relata Beatriz Madsen.

El Hotel Puma recibe un pro­medio de cuatro a seis grupos por año y en el 2017 tuvieron la presencia de 200 daneses. Los grupos mantienen una estadía de siete y ocho días. También llegan franceses, alemanes y de otros países europeos, pero en menor cantidad. "A ellos ya no les llama la atención el cemento, el lujo y la moderni­dad, pero sí un lugar cómodo y de calidad, con mucha natu­raleza cerca, que les sirva de aventura. Todo eso encuen­tran con nosotros en Puma", dijo la empresaria.

El Hotel Puma tiene capaci­dad para 110 personas, salón de eventos para unas cien personas, salas para reu­niones, restaurante y salas de juegos como tenis mesa. Para los niños disponen de un juego danés, Lego. Está en un predio de cuatro hectáreas, cuenta con área deportiva con canchas de fútbol y vóley, piscina rodeada de verde y la galería que tiene toda la estructura y que gusta a los visitantes, según la empresa­ria. El verano es el que regis­tra mayor cantidad de ocupa­ción con un promedio de 70% mientras que en el invierno es el más bajo, 45%.

Los grupos de turistas traídos por Paraguay Viajes se hos­pedan en Hotel Puma, pero desde allí realizar tours hasta las Cataratas de Yguazú, ya sea del lado argentino o paraguayo, así como a otros lugares como los Saltos del Monday, en Ciudad del Este e incluso las Reducciones Jesuíticas, en el Sur del país.

CONOCIMIENTO DEL IDIOMA

Beatriz Madsen agregó que el conocimiento del idioma danés es un elemento que ayudó a captar a esos turistas para hospe­darse en el hotel de Mallorquín, pero también cuenta que "existe un aspecto más influyente aún en la decisión de estos turistas de venir a nuestro hotel y es el poder ver la realidad, no es un lugar que se pintó para que los turistas vean, ellos quieren conocer de cerca nuestras comunidades y su gente, nosotros les damos esa atención directa".

Beatriz y Jan son los propietarios, pero siguen haciendo de guías y ellos mismos acompañan a los daneses a conocer el lugar, a internarse en el bosque y explicarles sobre hierbas y costumbres paraguayas. "Ese tipo de cosas les encanta", remarca la empresaria que considera que el éxito del negocio consiste en detectar la potencialidad del lugar, de lo que pueden ofrecer atendiendo a las características de los visitantes.

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