Desde la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) advierten sobre el efecto negativo que tendrá, en un eventual caso, no contar con el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) para la economía paraguaya. “Eliminar el ISC no reducirá ni frenará precios de combustibles, pero producirá un gran agujero fiscal equivalente al presupuesto de salarios del personal de blanco de salud o al salario anual de más de 40.000 docentes, o a la totalidad del presupuesto del Ministerio del Interior”, resalta Aduanas.

Ante las fluctuaciones en los precios del barril del petróleo a nivel mundial y en consecuencia aumentos significativos y sostenidos en los precios de los combustibles, se buscan opciones para mitigar los impactos en todos los sectores. Los precios de los combustibles ya estaban en alza y con la prolongación del conflicto entre Rusia y Ucrania siguen subiendo.

Es un fenómeno mundial que complica el panorama para la recuperación económica. Uno de los efectos es que Estados Unidos está experimentando la mayor inflación de los últimos 40 años; el mismo fenómeno experimentan tantos países de la región, y Paraguay no es la excepción, señala la DNA.

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Primer intento de frenar precio

El sector privado, con apoyo y sacrificios fiscales por parte del Gobierno, redujo el pasado 8 de febrero el ISC del diésel tipo III de G. 680 a Gs. 430; nafta 85 octanos de G. 737 a G. 609; y nafta 91 de G. 2.312 a G. 2.051, respectivamente; de igual manera, días después los emblemas elevaron sus precios. Con esta medida, el fisco perdió solamente en febrero G. 47.000 millones y la suba de los precios absorbió en pocas semanas la reducción del impuesto.

“En otras palabras, el primer intento no funcionó porque la suba de los precios internacionales es un problema que está durando más tiempo de lo que se suponía al principio; además, porque el fenómeno de la suba de precios se genera fuera del control nacional”, agrega.

De todas maneras, el sacrificio fiscal es una demostración que el Gobierno busca y buscará mitigar los impactos en la ciudadanía, pero la recaudación de Aduanas que transfiere diariamente al Tesoro Nacional para financiar el presupuesto público de educación, salud, seguridad nacional, etc., se redujo de manera importante. El remedio será más costoso que la enfermedad, advierten desde la entidad.

Precisiones

La DNA realizó, en ese sentido, precisiones para evitar malas interpretaciones respecto a las tasas reales del ISC. Dijo que, en primer lugar, es falso que el Impuesto Selectivo al Consumo del combustible sea de 38%. El 80% del combustible importado tiene una tasa ISC de entre 6% y 8%, aproximadamente.

La tasa de 38% es exclusivamente para la nafta de 97 octanos (apenas representa el 0,11% del mercado con un consumo insignificante), pero la mayor parte de los combustibles importados y comercializados y que más impactan en los consumidores son la nafta virgen (para elaborar nafta 85 octanos), que tiene un ISC real de 8% (impuesto cobrado efectivamente G. 609 y el precio de venta de hoy es G. 7.615), y el diésel tipo III que tiene una tasa efectiva del 6% (impuesto cobrado efectivamente es de G. 430 y el precio de venta actual es de G. 7.050).

En diésel tipo III representa el 83% del mercado del diésel (el 17% corresponde al diésel tipo I) y la tasa efectiva del ISC está muy debajo de la tasa nominal de 18% (hoy está en 6%). La nafta virgen y el diésel tipo III representan cerca del 80% de todo lo importado.

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Impuesto selectivo al consumo (ISC). Foto: Gentileza.

Precios vinculados

En segundo lugar, Aduanas aclara que es falso que el impuesto de la nafta 85 y del diésel tipo III esté vinculado a los precios de mercado (80% del total importado). La explicación es que los montos que se recaudan por ISC están congelados hace tiempo y el valor imponible (monto que se utiliza para el cálculo del impuesto) está muy por debajo de los precios de mercado. Más del 80% de lo recaudado en concepto de ISC no guarda relación con los precios de mercado, sino con montos fijos predeterminados.

Estos montos fijos por debajo del precio de mercado significan reducciones importantes en el precio del combustible desde hace varios años atrás y totalizan alrededor de 100 millones dólares anuales que el fisco no percibe desde antes de la reducción de febrero último.

“La reducción de 680 guaraníes a 430 guaraníes por litro y otras reducciones representarán cerca de G. 600.000 millones menos en términos de recaudaciones en 12 meses. Esta reducción ya fue tomada (medida que va hasta fines de marzo), pero posiblemente se mantenga por la situación actual. La propuesta de algunos sectores es ahora reducir o eliminar el ISC… La pregunta es, ¿cómo se financiará el aumento en el déficit fiscal?”, mencionan desde Aduanas.

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Considerando los datos de importación disponibles en el Sistema SOFIA, en el 2021 se han importado 2.739 millones de litros entre gasoil y naftas, lo que ha generado para el fisco pérdidas de G. 2,4 billones, siendo el equivalente a US$ 370 millones.

La eliminación del cobro al Impuesto Selectivo al Consumo por un lado tendría un efecto marginal en el nivel de precios (por unas semanas) y nulo incluso a corto plazo, y por otro lado generaría una agujero fiscal de consecuencias muy graves para el país, más aun considerando el nivel de endeudamiento del país al cual se ha tenido que recurrir para hacer frente a los efectos generados por prácticamente 2 años de la pandemia del COVID-19.

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