AFP
China anunció la inminente imposición de sanciones contra las empresas de EEUU implicadas en una venta de armas por 2.200 millones de dólares a Taiwán, isla reivindicada por Pekín. “Las ventas de armas a Taiwán por parte de Estados Unidos constituyen una grave violación de las normas fundamentales del derecho internacional y de las relaciones internacionales”, indicó en un comunicado Geng Shuang, un portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores.
“Para preservar los intereses nacionales, China impondrá sanciones a empresas estadounidenses que participen en esta venta de armas a Taiwán, agregó. El portavoz no precisó la naturaleza de las medidas de represalias ni a qué compañías iban dirigidas.
China considera a Taiwán como una de sus provincias. El territorio está dirigido por un régimen rival que se refugió en esta isla después de la llegada al poder de los comunistas en el continente en 1949, al término de la guerra civil china. Alrededor de 23 millones de personas habitan en esta isla, y la gran mayoría pertenecen a la etnia Han como en China continental.
250 LANZAMISILES
Taiwán no es reconocido como un Estado independiente por la ONU. Y Pekín amenaza con recurrir a la fuerza en caso de una proclamación formal de independencia en Taipéi o de intervención exterior, especialmente de Washington.
El lunes, el departamento de Estado estadounidense anunció la mencionada venta de armas. Esta comprende 108 carros de combate y 250 lanzamisiles tierra-aire. El congreso estadounidense tiene 30 días para oponerse, algo poco probable.
No es la primera vez que Estados Unidos autoriza una venta de armas a Taiwán, y cada vez que ocurre, China muestra su firme oposición. Sin embargo, el anuncio de sanciones contra empresas estadounidenses no es habitual. Al día siguiente del anuncio, Pekín reaccionó llamando a Washington a “anular inmediatamente” la operación para “evitar perjudicar aún más las relaciones” bilaterales.