Dicen que una parte de nues­tra alma permanece dor­mida hasta que conectamos realmente con una mascota y aunque suene cursi o repe­titivo, lo cierto es que la cien­cia ha comprobado que para los niños es muy beneficioso tener un amigo de cuatro patas que le haga compañía.

A nivel psicológico se com­probó que los niños tienen menos posibilidades de padecer ansiedad, depre­sión y estrés. Esto se debe a que la atención que le dan a las mascotas, sentir su com­pañía y jugar con ellas, los mantiene enfocados en un presente alegre. Un estudio de la revista Social Develop­ment afirma que los peques gestionan mejor las situacio­nes de tensión social junto a un animal de compañía y los menores dijeron sentirse con más seguridad y confia­dos al lado de ellos.

Algo que puede suceder con los niños del hogar es que tiendan a sentirse solos, más si los padres trabajan; los animales ayudan a paliar esta sensación de soledad, también mejoran el autoes­tima y la tristeza. Si bien los peluditos no son sustitutos sino complementos, psicó­logos de la Universidad de Miami y de San Luis, Esta­dos Unidos, afirman que los beneficios emocionales pueden ser iguales a los de la amistad humana.

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LO QUE LES ENSEÑAN

Por otro lado, con los ani­males los niños aprenden el sentido de la responsabili­dad. Al tener que cuidarlos, darles de comer, cambiarle el agua y levantar sus dese­chos, entienden de la impor­tancia del cuidado, se sien­ten útiles y su confianza aumenta. Los animales tam­bién les transmiten valores como el amor, la empatía, la fidelidad… que los vuelven mejores personas.

A nivel físico, un niño que elige jugar con su mascota antes que entregarse al ocio de la tele y los video­juegos, tiene menos proba­bilidad de tener sobrepeso. Las caminatas con su mas­cota o correr detrás suyo por toda la casa les hace quemar más energía y sentirse relajados. Igual­mente, la exposición tem­prana a los animales ayuda a que los más pequeños del hogar desarrollen un sis­tema inmune más fuerte, lo que previene el desarrollo a infecciones y reacciones alérgicas.

Entre otros beneficios, los animales les transmiten valores como el amor, la empatía, la fidelidad, entre otras cosas, que los vuelven mejores personas.

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