El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Raúl Torres Kirmser, mediante una nota dirigida al presidente de la Cámara de Senadores, Silvio Ovelar, solicitó la suspensión por el término de un año de la entrada en vigencia de la Ley 6.059/18, que modifica el Código de Organización Judicial y amplía funciones de los juzgados de Paz hasta tanto se realice la reglamentación respectiva, se determinen los insumos necesarios, factor humano y tecnología, así como los costos y se disponga la asignación o provisión de los recursos presupuestarios necesarios para su inclusión en el próximo ejercicio fiscal.
La Ley N° 6.059/18 amplió las funciones de los jueces de Paz en el ámbito Civil, Comercial, Laboral y de la Niñez y la Adolescencia. La norma también dispone que los jueces de Paz tengan la facultad de disponer las medidas de protección urgentes para niños en casos de vulnerabilidad. La misma fue vetada por el Poder Ejecutivo, pero ratificada y sancionada por la Cámara de Senadores.
EN CONTRA
Ya el 29 de mayo pasado Torres Kirmser remitió un dictamen al senador Fernando Silva en su carácter de titular de la Comisión de Legislación de la Cámara Alta. El documento señala que es preocupante que la modificación legislativa que se plantea no haya sido precedida de un diagnóstico adecuado y sobre bases científicas de cómo se están llevando actualmente las competencias que ya tiene ahora la Judicatura de Paz, en términos de eficiencia y eficacia del servicio a las personas usuarias, diferenciadas por regiones y por áreas rurales y urbanas.
También menciona en la nota que en la actualidad los juzgados de Paz de la capital y otros centros urbanos densamente poblados ya afrontan una enorme carga laboral, con no menos de 12.000 a 18.000 casos por año, en promedio. “Esta cantidad de casos ya hace difícil hoy atender debidamente todos los litigios y cumplir con los plazos procesales. La nueva ley solo agravará esta circunstancia”, indica el escrito.