Integrantes de la comisión que investiga el lavado de dinero y delitos conexos atribuidos a Darío Messer llevan sobre sí oscuros antecedentes por supuestos hechos de corrupción en la provisión de alimentos escolares. Pese a las fuertes denuncias, el Ministerio Público nunca fue protagonista para sentenciar sobre estos casos.

Los legisladores Rodolfo Friedmann Alfaro, Éver Noguera y Celeste Amarilla estuvieron envueltos en grandes negociados en la provisión de alimentos para niños. Las acusaciones son concretas, pero la justicia no marcó presencia.

En el caso del senador Friedmann, hombre fuerte del presidente Mario Abdo Benítez, según auditoría hecha por la propia Contraloría General de la República (CGR), solo en el 2016, cuando se desempeñaba como gobernador de Guairá, se detectó un total de 203.149 raciones de almuerzo sin registro de entrega por G. 2.295.583.700.

Entre las irregularidades detectadas por el órgano contralor se destacan exorbitantes sumas de dinero entregadas en concepto de anticipos, además de una importante cantidad de raciones de alimentos enviada a instituciones educativas sin estipularse en contrato.

La principal empresa que se benefició en este negocio es la firma Eventos y Servicios Sociedad Anónima (ESSA), representada por mucho tiempo por Éver Aricio Noguera, actual diputado abdista y amigo cercano de Friedmann, quien ahora es un intocable investigador sobre el caso Messer.

Otra que fue blanco de denuncias en el negocio de alimentos para niños es la diputada liberal Celeste Amarilla. Los medios masivos de comunicación, en su momento, se hicieron eco del despilfarro en la merienda escolar que involucra a la legisladora, pero quedó en el olvido y hoy ella es flamante investigadora anticorrupción.

Su empresa fue denunciada por distribuir leche en polvo de dudosa procedencia. Según las acusaciones del ex concejal departamental de Central Bernardino Vargas, la empresa Masily Paraguay SRL, que estuvo representada por la liberal, entregaba almidón en vez de leche en polvo a los niños. La bolsa no tenía ni siquiera fecha de elaboración, mencionan las publicaciones que datan del 2007.

Además de la denuncia en el departamento Central, se realizaron otras acusaciones en otros puntos del país como Ciudad del Este. En el 2008, esta misma empresa fue denunciada e involucrada en un esquema plagado por irregularidades que movía cerca de G. 10.000 millones. Esta situación habría permitido un descomunal negociado mediante un manejo discrecional facilitado por la administración del entonces gobernador de Alto Paraná, Antonio Gustavo Cardozo (PLRA), según habían detectado auditores de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP). Hecho que fue publicado en varios medios de comunicación.

La administración del gobierno anterior, encabezada por Horacio Cartes, rompió el esquema de privilegio de cuatro firmas que estaban en el negocio de la merienda y el almuerzo escolar, que demanda anualmente un presupuesto de US$ 200 millones. Entre ellas estaba como afectada la empresa Masily Paraguay SRL, por lo que se entiende el interés de la parlamentaria en involucrar a Cartes en un esquema irregular sin muchas argumentaciones consistentes.