La Policía detuvo a un hombre que aparentemente usurpaba la identidad de autoridades nacionales y conocidos empresarios en las redes sociales para embaucar y extorsionar a modelos y periodistas.

Se trata de Marcelo Ramón Barreto Núñez (31), alias “Chelo”, quien fue sindicado como presunto responsable de un esquema de coacción. El mismo fue detenido mediante un operativo que se llevó a cabo en el barrio San José de la ciudad de Pilar, departamento de Ñeembucú.

El comisario Nimio Cardozo, jefe del Departamento Antisecuestro de la Policía Nacional, en contacto con Radio 1000, detalló que el joven detenido ya posee antecedentes por hechos similares y que ahora se constató que seguía con la misma práctica. Esto pudo saberse al tener conocimiento de la existencia de perfiles presumiblemente falsos con la suplantación de identidad de autoridades nacionales, los cuales llevaron al personal interviniente hasta la individualización del supuesto responsable.

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El uniformado detalló que hace unos meses el sospechoso generó un perfil falso en Instagram de Arnaldo Giuzzio ni bien este asumió como ministro del Interior. Mediante esta cuenta contactaba con mujeres conocidas del ambiente del modelaje e incluso periodistas muy conocidas.

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El interviniente dijo que el hombre armó tan bien su esquema de engaño que al mirar el perfil de Instagram uno podía creer que se trataba de una cuenta real. Es así que incluso llegó a pedir supuestamente G. 10 millones a una familia para conseguir cama en UTI a paciente con COVID-19.

“Nosotros pudimos bloquear esa cuenta y hace tres semanas habilitó una cuenta del ministro de Salud, Julio Borba. Decidimos hacer una operación encubierta y detectamos que era esta persona y al trasladarnos a Pilar constatamos que no estaba cumpliendo con su prisión domiciliaria, por lo que ayer la Justicia revocó esa medida”, indicó.

Extorsión a promotora

Cardozo comentó que Barreto está actualmente siendo investigado por un caso ocurrido en el 2018, cuando una joven promotora cayó en el esquema de coacción. En breve se iniciará un juicio oral en el marco de esta causa.

De acuerdo a los antecedentes, la víctima declaró que fue contactada a través de la red social Instagram por una persona que se hizo pasar por Diego Domínguez (un empresario conocido), quien le propuso mantener relaciones sexuales y a cambio le ofreció pagar la suma de 3 mil dólares americanos y que para el efecto debía viajar hasta la ciudad de Pilar.

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La mujer aceptó la propuesta y viajó a la capital de Ñeembucú, hasta una residencia que le indicó la persona que la contrató. Una vez en el lugar, la joven fue recibida por el supuesto secretario del supuesto empresario Domínguez. Seguidamente, la víctima recibió un mensaje en su celular de este último, quien le manifestó que debía mantener relaciones con la persona que estaba en el lugar.

La promotora cumplió el pedido y luego de tener relaciones sexuales con el encargado de la casa quedó dormida en el sitio. Ese momento habría sido aprovechado por el hombre (que dijo llamarse Nelson, pero en realidad era Marcelo Barreto) para tomarle fotografías y filmaciones, estando desnuda, y sin que ella se percatara del hecho.

La joven quedó a pasar la noche en el lugar y al día siguiente viajó hasta la Terminal de Ómnibus de Asunción, donde en teoría debía esperarle la persona que se hacía llamar Diego Domínguez para pagarle los 3.000 dólares por el servicio prestado, pero el hombre nunca apareció.

Posteriormente, a través de otro perfil de Instagram (a nombre de una mujer) contactaron con la víctima y le exigieron el pago de 3 millones de guaraníes para no publicar las fotos y videos íntimos. Como una demostración de lo que podía hacer, el presunto extorsionador envió estas imágenes a una amiga de la afectada.

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