Más de 45.000 almas con cánticos y coloridos fueron una sinfonía en la Nueva Olla Azulgrana, pero no fueron suficientes para impedir la victoria de Olimpia ante el tradicional rival luego de 41 años.

Luego de dos temporadas sin la hinchada en los esta­dios, ayer el principal coliseo del país presentó un impo­nente marco de público para disfrutar de una plena jor­nada de fútbol y así lo fue. El Decano triunfó mereci­damente con un plantea­miento inteligente de su entrenador.

Un riguroso control policial previo al ingreso al estadio se implementó ayer en Barrio Obrero.FOTO:CARLOS JURI

Además del éxito, el Decano rompió el hechizo en el estadio General Pablo Rojas luego de más de cua­tro décadas. La última vic­toria del Decano en barrio Obrero antes del clásico de ayer fue en 1981, por 1-0, con gol de Eduardo Ortiz. Luego de aquel éxito olim­pista del 81 pasaron 6 clási­cos, donde se registraron 4 victorias de los cerristas y 2 empates. Además, el cua­dro cerrista no había reci­bido goles de su acérrimo rival en los últimos cinco compromisos en La Nueva Olla, hasta el gol de Alejan­dro Silva.

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El fantasma de la B apareció en las gradas azulgranas cargando al tradicional rival.FOTO:JORGE ROMERO
Una fiesta colorida pintaron los hinchas del Ciclón, animando el superclásico.FOTO:NÉSTOR SOTO

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