Kate Conger, Gabriel J.X. Dance y Mike Isaac

San Francisco

El 20 de setiembre, Facebook anunció que había suspendido decenas de miles de aplicaciones que succionaban de manera deshonesta la información personal de los usuarios y realizaban otras transgresiones, con lo cual admitió tácitamente que la escala de sus problemas con la privacidad de los datos era muy superior de lo que había reconocido.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

En una publicación de blog, la red social señaló que una investigación que había iniciado en marzo del 2018 –tras las revelaciones de que Cambridge Analytica, una consultoría británica, había obtenido y usado información de gente en Facebook sin su permiso– había dado como resultado la suspensión de “decenas de miles” de aplicaciones que estaban asociadas con unos 400 desarrolladores. Esa cifra fue mucho mayor que la última divulgación que hizo Facebook en agosto del 2018: 400 aplicaciones suspendidas.

El alcance de la cantidad de aplicaciones que había eliminado Facebook se reveló en expedientes judiciales que abrió un tribunal estatal en Boston el 20 de setiembre, como parte de una investigación de la fiscal general de Massachusetts en torno a la empresa tecnológica. Los documentos mostraron que Facebook había suspendido 69.000 aplicaciones. De estas, la mayoría fue eliminada porque los desarrolladores no cooperaron con la investigación de Facebook; 10.000 fueron marcadas por posiblemente haber hecho un mal uso de los datos personales de usuarios de Facebook.

SUMAR USUARIOS

Las revelaciones sobre la suspensión de las aplicaciones renovaron los cuestionamientos sobre la seguridad de la información personal de la gente en Facebook, aun cuando la empresa ha estado bajo fuego durante más de un año por sus prácticas de privacidad.

Las aplicaciones de Facebook pueden tener varias formas, desde aplicaciones de música como Spotify hasta juegos como Candy Crush. Algunas aplicaciones usan Facebook simplemente para que la gente pueda entrar en su servicio o producto y, salvo por eso, no tienen nada que ver con la red social. El común denominador es que estas aplicaciones quieren acceso a información sobre miembros de Facebook para poder sumar nuevos usuarios.

Al ser la red social más grande del mundo, Facebook tiene datos de más de 200 millones de personas. Sin embargo, demostró que no había logrado proteger parte de esa información cuando, en el 2016, Cambridge Analytica obtuvo algunos de esos datos sin el permiso de la gente y creó perfiles de votantes a partir de ellos para la campaña presidencial de Trump, sobre lo cual informaron en el 2018 The New York Times y The Observer en Londres.

Dejanos tu comentario