Por Gustavo Colmán Rodríguez

Olimpia realizó un trabajo acorde a sus pretensiones, pero le faltó profundidad en ataque para evitar la derrota (0-1) ante Botafogo, pero que con la mínima desventaja, puede revertir la historia en el juego revancha en Asunción.

El equipo de Repetto de nuevo falló en la definición, un pecado ya arrastrado desde la pretemporada, pero que ante el equipo brasileño deberá marcar para seguir su sueño copero.

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Intenso fue compromiso desde que se movió el balón en el arranque y todo porque Olimpia fue arriba a apretar al rival y no dejarle salir con soltura.

El Botafogo sintió la presión y debió recurrir a los pelotazos para intentar llegar hasta el arco defendido por Librado Azcona. Este tuvo un comienzo muy tranquilo, pues casi no llegaron con peligro los brasileños, salvo algunas pelotas aéreas que se cruzaron frente al arco.

Sin embargo de una manera inesperada llegó el tanto del equipo local. Lateral por derecha y el balón no puede ser rechazado por Cañete, le queda alto a Rodrigo Pimpao, pero éste inventa una rápida chilena y anota el gol para el equipo brasileño.

El tanto motivó la reacción franjeada que se hizo más notorio su juego en ataque, pero careció de profundidad pues Brian Montenegro, fue absorbido por la marca de los 'matungos' zagueros brasileños.

El complemento se presentó de la misma forma. Botafogo no atacó de manera apresurada, más bien jugó tratando de controlar el balón y buscar algunas opciones para intentar aumentar el marcador.

El ingreso de Roque Santa Cruz, fue como para tapar las subidas de los zagueros, pero su trabajo en ofensiva no pesó y Olimpia de a poco fue conformándose con una derrota mínima, que puede ser revertida en Asunción.

La buena tarea de Julián Benítez no alcanzó, -hizo todo menos el gol para ayudar a su equipo- lo malo fue que no encontró respuesta en sus compañeros.

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