Por Laura Morel

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En 2015, Carmen fue electa la mejor en la modalidad de atletismo y también ganó el Victoria de Oro.

Como presidenta de Paraguay Marathon Club (PMC) y, sobre todo, de la Federación Paraguaya de Atletismo (FPA) Myrta Doldán celebra el momento histórico que está a punto de vivir el atletismo nacional con la participación de dos atletas en la prueba cumbre de los Juegos Olímpicos: la maratón.

Carmen Martínez (domingo 14) y Derlys Ayala (domingo 21) escribirán oficialmente sus nombres en Río 2016, los primeros JJOO de Sudamérica, cuando comiencen a dar sus primeros metros de los poco más de 42 kilómetros que recorrerán para hacer realidad un sueño que les fue propuesto por Doldán.

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"No fue un objetivo inicial", confiesa con absoluta sinceridad, "sino que yo quería potenciar a los corredores de las carreras de calle que siempre fueron marginados", aclara, explicando seguidamente como comenzaron a buscar potenciales atletas que pudieran correr una maratón.

"Primero vi a Carmen, que siempre se destacaba en las marcas, y luego a Derlys, que es la luz de mis ojos, vive conmigo en casa y siempre hablábamos sobre eso y le preguntaba si él podría correr 42 kilómetros. Al ver su potencial traje a un entrenador del exterior para que le hiciera una evaluación y cuando me dijo que tenía condiciones, comenzamos a trabajar", relata.

Carmen Martínez clasificó a Río 2016 con un año de anticipación. Algo nada sorprendente, considerando su costumbre de mejorar marcas y establecer nuevos records nacionales. De Derlys, que se volvió maratonista hace apenas un año, Doldán reconoce que "no pensaba que fuera a clasificar tan rápido, porque él era más de pista y lo máximo que corría era 21 kilómetros".

Es por todo eso que Myrta Doldán asegura que para ella "es un orgullo, una satisfacción muy grande" verlos competir en unos Juegos Olímpicos, "porque son como mis hijos, son atletas de Paraguay Marathon Club e hicieron la marca durante mi gestión en la Federación Paraguaya de Atletismo".

Derlys y Myrta, a quien el considera como su verdadera madre (fue abandonado por la suya)

Lágrimas de emoción

"Creo que es una recompensa por los 25 años de trabajo que tenemos en las carreras de calle, y de las carreras de calle debían salir los dos atletas clasificados a estos Juegos Olímpicos", agrega quien se emocionó hasta las lágrimas cuando vio a sus atletas alcanzar las marcas clasificatorias.

"Cuando Carmen consiguió la marca el año pasado yo estaba en París. No llegué a Rotterdam, pero inmediatamente me comuniqué con ella. Lloré, no podía hablar... y cuando Derlys lo hizo estuvimos en casa sin dormir toda la noche, porque Marcelo Iturralde, que trabaja con nosotros en PMC, lo acompañó a Rotterdam y transmitió todo. Acompañamos kilómetro a kilómetro, porque la cosa era después de los 21k. Cuando llegó a los 30k ya era llorando, porque faltaban 12k y cualquier cosa podía pasar. Ahí te puede dar un tirón. Corrió los últimos kilómetros por la fuerza que le transmitíamos, porque ya estaba con un dolor muy fuerte", rememora.

Sobre la participación de Martínez y Ayala, la presidenta de la Federación asegura que "la idea es que mejoren sus marcas" porque "son más de 200 participantes de todo el mundo y donde el récord está por las dos horas, lo que hace casi imposible que lleguen al podio". "Pero el participar ya es un mérito y yo estoy visualizando Tokio 2020. Ahí me voy a poner todas las pilas para que ellos hagan una marca. Tenemos cuatro años para entrenar", acota.

Por último, quien tomó en sus manos la bandera de los denominados "corredores de calle", pide a los mismos, "que saben la satisfacción que sienten al mejorar su calidad de vida y así están siendo un ejemplo para sus familias, que motiven a los chicos, pues de allí saldrán los futuros atletas olímpicos". "Lleven a los hijos y nietos a las escuelas de atletismo para ver sus cualidades y para que los orientemos respecto a en cuál disciplina pueden desarrollar mejor su potencial", sentencia quien hoy puede decir con orgullo que ya colectó dos frutos de este gran trabajo.

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