Unas 9 unidades del transporte público, de la empresa que explota el servicio de la línea 51, fueron atacados a las 22:20 de anoche. De acuerdo a datos de la Comisaría 3a Central, Luque, el acto de vandalismo tuvo lugar en el centro de la ciudad, más precisamente en la intersección de las calles General Aquino y Teniente Rivas.

"Fueron atacadas cobardemente, porque eso es cobardía. Los nuevos ataques fueron anoche y crearon varios daños. Uno de los choferes tuvo fractura de maxilar porque fue alcanzado por un hierro", dijo César Ruiz Díaz titular del Centro de Empresarios del Transporte del Área Metropolitana CETRAPAM.

El empresario comentó que los ataques se dan generalmente por la noche, ocasión en las que a los vándalos les resulta más fácil actuar.

"A esta hora no existe nada, se cobijan en la complicidad de la noche y la gente corre peligro. El día que tengamos los nombres, nos aseguraremos que vayan sus huesos a la cárcel. Creo que la Fiscalía está haciendo su trabajo". agregó.

Ruiz Díaz refirió que estas personas actúan de manera extremadamente violenta, al parecer bajo efecto de alguna sustancia.

"A la gente no le importa los daños que provoquen, ni material y a los que están en los buses. Actúan bajo efecto de alguna sustancia que los vuelve locos. Pero la rotura de la mandíbula de este chofer no tiene precio", manifestó.

El titular de CETRAPAM explicó que la reparación de cada parabrisas destruído tiene un costo de unos Gs. 2.500.000.

VÍCTIMA

Uno de los conductores de uno de los buses atacados resultó con fractura de mandíbula, añadió luego Ruiz Díaz. El chofer fue identificado como Mauricio Ismael Morales Cáceres. Habría sido alcanzado en el rostro con un objeto de hierro.