Washington, Estados Unidos.
Estados Unidos revocó ayer jueves el marco normativo de la "neutralidad de la red", el principio por el cual los proveedores de internet tratan de manera equitativa el tráfico, en medio de un enconado debate sobre la libertad online y el papel de las corporaciones.
La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), en una votación de 3 a 2, aprobó una propuesta del presidente Ajit Pai, designado por el gobierno de Donald Trump, quien dijo que se propone acabar con reglas "torpes" que desalientan la inversión y la innovación.
La comisionada demócrata Mignon Clyburn, contraria a la decisión, señaló que la FCC "está entregando las llaves de internet" a "un puñado de corporaciones multimillonarias".
La medida, que anula reglas fijadas en el 2015 bajo el gobierno de Barack Obama, teóricamente permite a los proveedores de servicios de internet (ISP) decidir a qué sitios web se podrá acceder y a qué velocidad, lo que podría conducir a la creación de una "internet de dos velocidades".
Quienes defienden la neutralidad han protestado online y en varias ciudades de Estados Unidos ante el temor de que las grandes empresas proveedoras de banda ancha puedan cambiar la forma en que internet funciona, favoreciendo sus propios servicios y obstaculizando los de sus rivales, y cobrando más por ciertos tipos de acceso. La votación se realizó tras una encendida discusión sobre un tema que ha sido objeto de varias batallas judiciales en la última década. Funcionarios de dos estados y activistas por los derechos de los consumidores ya prometieron impugnar la decisión en los tribunales.
Pai dijo antes de la votación que su plan instauraría nuevamente las reglas "ligeras" que permitieron que internet floreciera, y promovió inversiones para habilitar servicios nuevos y emergentes. "Los empresarios e innovadores guiaron internet mucho mejor que la pesada mano del gobierno".