La Cámara de Diputados aprobó ayer en su sesión extraordinaria el proyecto de ley de Financiamiento Político cuyo fin se centra en evitar que las campañas políticas sean financiadas por recursos provenientes del narcotráfico, lavado de dinero u otro hecho irregular. Su aplicación se efectuará también en las elecciones internas.

El proyecto original sufrió varias modificaciones como el aporte que puede realizar una persona en particular para una campaña electoral. La propuesta establecía un tope equivalente a 7.000 jornales mínimos el cual a pedido del colorado oficialista Bernardo Villalba, se estableció a 50.000 jornales mínimos equivalentes a 1 millón de dólares. Otro cambio se centra en que las personas acusadas formalmente por tráfico ilícito de estupefacientes y drogas peligrosas, lavado de dinero, trata de personas, terrorismo, al tráfico de armas y contrabando no podrán aportar a las campañas.

Entre los principales cambios se eliminó la posibilidad de que la Contraloría audite los balances de los gastos electorales de los candidatos. Para hoy se prevé la incorporación de una addenda en el artículo 64 sobre gastos que no exceden a un salario mínimo. El punto será tratado como primer punto del orden del día para luego remitir el documento al Senado. También, se evaluará como segundo punto la propuesta de desbloqueo de listas sabana.