• Por: VIVIANA ORREGO
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Salir del despacho e ir al encuentro de la gente, como dice el papa Francisco, es el desafío trazado por monseñor Ricardo Valenzuela, nuevo obispo de Caacupé, quien realizó su primer acercamiento oficial a los medios de comunicación como rector de la diócesis, ayer tras la misa dominical.

Comentó su deseo de convertir la Basílica en el "Santuario de los jóvenes", en el marco del Trienio de la Juventud, e invitó a los jóvenes, especialmente a los huérfanos, a acercarse a la madre Virgen de Caacupé y él como padre saldrá al encuentro, señaló.

Valenzuela presentó su Plan Pastoral enfocado en el servicio y al acercamiento a las familias, que es lo que caracteriza a su misión espiritual. Señaló –en comparación con su trabajo anterior– que Cordillera es pequeña y que esto le permitirá recorrer todo el territorio para conocer a los diocesanos.

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Ayer tuvo su primer encuentro con jóvenes de San Bernardino. "Presento este servicio y lo hago en nombre de Dios, de la Santísima Virgen María y, sobre todo, de los necesitados y peregrinos. Para ellos estoy aquí", dijo y pidió "recen por mí".

También anunció que este miércoles tendrá una reunión con los 22 sacerdotes de Cordillera y que se presentará como su obispo y amigo. Comentó, además, que hoy se reunirá en sesión de Consejo Episcopal en el que tratarán temas como la situación de la Universidad Católica (UCA) y la crisis del campesinado en Asunción que se agudizará hoy tras el veto del proyecto de ley que aprobaría la condonación.

Respecto al pedido del campesinado y la negación del Ejecutivo, dijo que "es un tema bastante delicado, hay que estudiarlo bien. Con el dinero es muy difícil tratar, sobre todo en este caso. Hay que dialogar siempre. El Señor nos pide el uso de este instrumento poderoso que es el diálogo, la palabra, escuchar y hablar", resaltó Valenzuela.

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