• Carolina Vanni
  • enviada especial a Misiones

Con el compromiso de poner su vida y su ministerio al servicio de la comunidad de la Diócesis de Misiones y Ñeembucú, asumió monseñor Pedro Collar como nuevo obispo de la sede eclesial de San Juan Bautista y Pilar. El religioso se dirigió a su pueblo en un tono de voz apacible y tranquilo e instó a los fieles a que le ayuden en su misión.

La toma de posesión se hizo en el marco de la misa celebrada frente a la catedral de la cuidad de San Juan, a la que asistieron la mayoría de los obispos del Paraguay y el nuncio apostólico, monseñor Eliseo Ariotti.

El obispo Collar bendijo a quienes le estaban esperando.foto:PÁNFILO LEGUIZAMÓN

Antes de la celebración religiosa, el obispo fue recibido en las afueras de la ciudad. Al son de las campanas de la Catedral -que retumban por toda la cuidad-, fue conducido en cachapé seguido de una caravana hasta el centro, donde primero se reunió con los fieles, luego recibió la llave de la cuidad y, posteriormente, se reunió con el clero de la Diócesis, antes de la misa central.

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Ya iniciada la celebración religiosa, antes de la primera lectura, monseñor Mario Melanio Medina, -obispo saliente- entregó el cargo al nuevo titular de la Diócesis. Luego de recibir el báculo episcopal y la mitra, monseñor Collar recibió la adhesión y obediencia de los sacerdotes, religiosas, laicos y fieles de la diócesis de Misiones y Neembucú.

Monseñor Mario Melanio Medina y el nuevo obispo Collar, durante la homilía. Medina deja el cargo luego de 20 años.FOTO:PÁNFILO LEGUIZAMÓN

Monseñor Ariotti leyó la carta que el Papa Francisco envió, en ocasión de la investidura como obispo a monseñor Collar. "Hemos considerado, venerable hermano, que tú, quien como auxiliar del Obispo de Ciudad del Este, demostraste dotes humanas y sacerdotales y ser perito puntual de las actividades que deben realizarse", decía parte de la carta.

De esta forma, luego de 20 años de labor episcopal monseñor Medina dejó la diócesis en la que él se había iniciado en la vida sacerdotal y de la que se retiró recibiendo el reconocimiento de parte de los fieles y de las autoridades por su trabajo no solo pastoral, sino además en la defensa de los más desprotegidos.

Medina agradeció al Nuncio Ariotti, porque efectivamente antes de cumplirse los tres años de la renuncia que presentó al cargo, fue designado su sucesor.

Simbolismo. El obispo recibió la llave de la ciudad de parte de las autoridades.FOTO:PÁNFILO LEGUIZAMÓN

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