En este sentido, el secretario de la dependencia fiscal, calificó de "error" la determinación y habló de las implicancias negativas que generará como que la banca quede sin herramientas para realizar un combate frontal a la inflación.
Por ello, adelantó que apelarán al diálogo, de tal manera a que el Congreso Nacional revierta la decisión.
"Paraguay hoy se destaca como uno de los países con la inflación más baja y estable en la región y esto es como consecuencia de un proceso de fortalecimiento institucional y el desarrollo de las capacidades dentro del BCP, que con esta medida estaría perdiendo facultades", sostuvo.
Descartó que una política monetaria pueda implementarse en base a lo sucedido en los últimos tres años, ya que es un hecho que el mundo irá cambiando y el BCP tiene que tener todas las herramientas, porque de lo contrario los agentes económicos podrán especular sobre algo que la institución no hará.
Recordó que el objetivo principal de la banca es que la inflación sea baja y estable, que no sea volátil, sino que mantenga un control. Para ello, dijo el principal instrumento que tiene el Banco Central del Paraguay es la tasa de interés que paga por los instrumentos de regulación monetaria y que depende de las condiciones de mercado. Cuando necesita sacar liquidez del mercado para que no haya una inflación, aumenta la tasa de interés y cuando hay poco dinero, disminuye la tasa de interés.
"Estados Unidos hoy está hablando de que la tasa de interés de la Reserva Federal vaya a aumentar, entonces eso le va a obligar a Paraguay a que también tenga que aumentar la tasa de interés de su política monetaria", mencionó.
ATADO
El ministro expresó que puede plantearse el escenario de que el Banco Central del Paraguay necesite aumentar la tasa de interés, sin embargo, no podrá hacerlo ya que no cuenta con una autorización legal por parte del Senado.
Sobre el punto, dijo que la instancia entró a legislar una materia que no debería, teniendo en cuenta que existe una Ley aprobada en el año 2010 donde se establece que el mecanismo del presupuesto monetario no puede estar sujeto a un tope, porque genera un riesgo enorme, principalmente en la credibilidad y la capacidad de una institución como el BCP, de poder ejercer su política monetaria de manera responsable.