El fiscal Alberto Torres, uno de los encargados de las investigaciones tras el secuestro de un menor colono menonita en la zona de Río Verde, dijo hoy a medios de prensa que la explosión de la bomba casera en el camino a Capitán Bado, estaba dirigida a las fuerzas de seguridad que trabajan en la zona.

Confirmó que el artefacto explosivo fue detonado a corta distancia y que fue colocado en la madrugada, posiblemente ante el conocimiento de que la comitiva de la FTC pasaría por el sitio.

"Por suerte no sufrimos daño, pero esto demuestra que los secuestradores estan cerca y saben de los movimientos de los organismos de seguridad", indicó Torres.

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El agente fiscal también confirmó que tanto el nuevo secuestro como la detonación de la bomba cazabobos es responsabilida del EPP. También que se pidió un rescate de USS 700 mil a los familiares del jóven de 17 años.

Consultado sobre un posible error de los captores en cuanto a la víctima, el fiscal Torres señaló que por las características del hecho, hace presumir que efectivamente cometieron un error, pues la otra persona tomada junto al jóven, quedó posteriormente liberada.

"Pero eso es algo que no puedo precisar todavía en forma fehaciente, porque estamos juntado todavía evidencias para adjuntarlas a la carpeta fiscal. Ni siquiera con los familiares del joven secuestrado pudimos hablar todavía en forma tranquila", señaló.

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