Naciones Unidas, Estados Unidos | AFP |

Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos llamaron este lunes a un cese inmediato del fuego por motivos humanitarios en la ciudad de Alepo, en Siria, después de un bombardeo contra cuatro hospitales de la ciudad por el régimen del presidente Bashar Al Asad.

"La comunidad internacional simplemente no puede dejar que el este de la ciudad de Alepo se convierta en otra (...) zona sitiada", dijo el subsecretario general para asuntos humanitarios de la Onu, Stephen O'Brien.

"Es una situación medieval y vergonzosa. No debemos permitir que esto suceda", agregó. O'Brien advirtió que se espera que los suministros de alimentos en la zona ESTE de Alepo, bajo control de los rebeldes, se comiencen a agotar a mediados de agosto.

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"El Consejo de Seguridad no puede aceptar que esos crímenes de guerra se repitan", señaló por su parte el embajador francés Francois Delattre, comparando la situación de la ciudad el norte de Siria con la de Sarajevo, durante la guerra de Bosnia.

El diplomático lo expresó así ante periodistas poco después de una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU que estuvo consagrada a examinar la situación humanitaria en Siria.

El régimen sirio y sus aliados "están decididos a sitiar, a matar de hambre y bombardear Alepo, hasta alcanzar su objetivo militar", que es eliminar a la oposición, añadió Delattre.

Alepo está dividida desde 2012 en barrios controlados por los rebeldes, en el este, y otros por el régimen en el oeste.

Las fuerzas gubernamentales asedian desde hace varias semanas la parte oriental de la ciudad.

"Ya basta", indicó de su lado el embajador británico Matthew Rycroft. El Consejo de Seguridad tendría en sus manos la posibilidad de responder a la crisis de Alepo añadió el diplomático británico sin dar detalles.

Unos 200.000 habitantes de zonas rebeldes de Alepo están sitiados desde el 17 de julio y frecuentemente tomados por blancos de la aviación del régimen de Bashar al Asad y sus aliados rusos.

Los bombardeos han dañado el fin de semana cuatro hospitales y un banco de sangre, provocando la muerte de un bebé recién nacido, cuando se rompió la sonda de la que recibía oxígeno.

Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) al menos 19 civiles murieron este lunes por bombardeos sobre zonas controladas por los rebeldes en la provincia de Alepo.

En este balance figuran también al menos tres civiles muertos en la ciudad de Alepo por cohetes disparados por los rebeldes contra los barrios controlados por las fuerzas del régimen de Bashar al Asad.

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