La llegada de la procesadora de tarjetas de crédito, Braspag del grupo Cielo, a la zona fronteriza de Brasil, abre nuevas oportunidades de comercio electrónico para los comerciantes de la zona. La empresa acaba de firmar un acuerdo en Paraguay que permitirá la conexión directa para procesar el plástico en el país como respuesta al aumento en el volumen de las transacciones y la demanda de los clientes de Brasil, según informaciones dadas a conocer por medios del vecino país.
"Con este método, cualquier empresa que tiene entidad en Paraguay, independientemente de su nacionalidad, puede procesar sus transacciones en línea directamente con nosotros. Además de la optimización de los pagos electrónicos y el conjunto de procesos, es un gran paso para el crecimiento del comercio electrónico en Brasil y en América Latina", dijo Gaston Mattos, director general de Braspag.
La compañía también opera en países como Argentina, Brasil, Colombia y Chile contando con el modelo para los compradores minoristas que tienen operaciones en Canadá, Estados Unidos o México, y las operaciones globales de comercio electrónico a través de asociaciones internacionales.
OPORTUNIDAD
El presidente de la Fedecámaras de Ciudad del Este, Tony Santamaría, celebró la llegada de la procesadora de tarjetas al país, mencionado que se convertirá en una gran oportunidad para los comerciantes de la zona. "Los brasileños compran al contado y con tarjetas de crédito pero cuando tienen dificultad tienen que llamar a Brasil o al banco en Brasil. Pero estando Braspag en Paraguay les facilitará el uso de la tarjeta y nosotros suponemos que van a poder comprar a 12 meses con pagos diferidos como supuestamente lo hacen en el Duty Free de Argentina. Si eso es así, entonces vamos a estar en igualdad de condiciones con el Duty Free de Argentina y los comercios del Brasil que le venden a los brasileños", sostuvo el empresario.
Santamaría dijo que se mantienen en la postura de solicitar al Gobierno la conformación de una nueva empresa procesadora de tarjetas de créditos que aplique una tasa más razonable por cada venta realizada y cobrada con el plástico, es decir, en concepto de comisión. Siempre que la actual (Bancard) no acceda a reducir su costo administrativo del 8% al 1%.