Jartum, Sudán | AFP |

Susan Blankhart, de 63 años de edad, se había comprometido a nadar en el Nilo si la página en la red social internauta superaba los 10.000 'yo quiero'".

Con un traje de baño color naranja (el de su país), con el logotipo de su embajada, nadó centenares de metros en las movidas aguas del Nilo, acompañada por seis holandesas y siete sudanesas, bajo los aplausos de la gente que se acercó a las riberas del río.

"Fue muy agradable, magnífico, recomiendo que todos vengan a nadar al Nilo", soltó la diplomática en una risotada.

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Este baño tan especial estuvo controlado por un equipo de salvavidas sudaneses repartidos en varios kayaks.

Nadar en las aguas del Nilo junto a otras 13 mujeres tenía también por objetivo promover la emancipación de éstas en Sudán, subrayó Blankhart.

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