Por Martín Villagra

Después de un primer tiempo trabado, estudiado y con pocas ocasiones, el partido se movió en el complemento. En el primer periodo Sol de América arrimó peligro con un cabezazo y un tiro libre de Santiago Salcedo. Cerro no tenía ideas y tímidamente intentó con Ortigoza, que lanzó un remate que salió lejos. Blas Cáceres y Rodrigo Rojas no tuvieron ideas y se sintió la calidad del ausente Jonathan Fabbro.

Se perdió un tiempo, hasta que los citados fueron reemplazados. Sin embargo, Sol de América golpeó primero cuando Santiago Salcedo marcó de cabeza tras gran jugada de Edgardo Orsuza y centro violento de Nelson Romero.

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El azulgrana se confundió y los nervios le jugaron en contra. Sol apretaba, cerraba todos los conductos y avisaba de contragolpe. Un remate de Edgardo Orzusa casi sentenció el juego, pero salió por poco desviado. Dentro de ese ir y venir guapeó Fidencio Oviedo, desbordó Carlos Bonet y Sergio Díaz puso la igualdad tras buen control del balón.

En una acción posterior, "Sa-Sa" no hizo caso a la gentileza del juego limpio, que no está reglamentado y remató a gol, pero salvó a duras penas el golero Diego Barreto.

Pintaba para empate, pero en el último segundo Cecilio Domínguez, quien fue el tercer cambio azulgrana, ganó el fondo, remató fuerte y Teodoro Paredes sometió a su propia valla en su intento de rechazar el balón que no iba al arco. Explotó el grito azulgrana, cuya aspiración de campeonar sigue su curso en una pelea, que hasta ahora lo discute palmo a palmo con Guaraní.

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