POR ÓSCAR GAVILÁN

Sportivo Luqueño precisó de 45 minutos para vencer a los chicos gumarelos por 3 a 0, y se eleva en la tabla de posiciones. El conjunto azul y oro mejora su cotización con goles. El artífice del triunfo auriazul fue sin dudas el juvenil Jorge Núñez, quien abrió el camino del éxito, con un oportuno golpe de cabeza tras un preciso centro de Leguizamón.

A escasos 11 minutos, los dueños de casa sorprendieron a los alternativos albinegros. No hay dudas de que lo mejor del espectáculo se vivió en la etapa inicial, en donde llegaron los goles y las jugadas más claras ante las porterías. A los 34, Núñez pisó el área rival y fue derribado por Dávalos, el árbitro Quintana, quien estuvo cerca no dudó en sancionar la pena máxima.

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Leguizamón con un verdadero misil, desde los doce pasos, fusiló al golero Torresagasti para el 2 a 0. Pero los dirigidos de Eduardo Rivera fueron mucho más agresivos, y otra vez aparece el chico Núñez, en la cercanía del área rival, los zagueros liberteños por la impotencia lo frenaron con falta. Leguizamón, responsable de las jugadas de pelotas quietas, con un bombazo quemó las manos de Torresagasti, pero del rebote apareció como una luz Aquilino Giménez, para aplicar el testazo. Fue un golazo para el 3 a 0.

Libertad se perdió en un mar de imprecisiones y de nerviosismo, el golero Torresagasti, al término del primer periodo fue directo a insultar al árbitro, a pesar de tener una tarjeta amarilla. Quintana lo expulsó por la acción. Una gran irresponsabilidad del portero gumarelo, quien dejó en inferioridad numérica a su equipo.

El fútbol perdió brillo en la etapa final. Libertad intentó descontar y los auriazules mantener la diferencia. Luqueño suma otra victoria con el técnico Rivera y se acerca a los más encumbrados, en tanto Libertad queda en el camino.

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